TURISMO EN CÁDIZ

La Sierra de Cádiz funciona este verano como «destino refugio»

Las expectativas de turismo en los pueblos serranos se están superando gracias en gran parte a la clientela de Málaga, Sevilla y Cádiz

Zahara de la Sierra, El Bosque y Benamahoma son los lugares elegidos por los veraneantes para pasar las vacaciones del coronavirus. F. Jiménez

Cristina Moreno

Que este verano de 2020 es imprevisible está a la orden del día. En pleno agosto y con rebrotes de Covid-19 por todas las provincias españolas, el turismo sobrevive aunque con una tendencia muy diferente a la de años anteriores. Se caracteriza por escapadas cortas, de proximidad y organizadas con poca antelación.

Era a finales del mes de julio cuando el vicepresidente de la Junta de Andalucía y consejero de Turismo Juan Marín destacaba que en los alojamientos rurales de provincias como Cordoba, Jaén o Cádiz se encontraban al cien por cien y se esperaba la misma tendencia para agosto. Asimismo y según los datos publicados por el portal escapadarural.com las provincias favoritas para este tipo de turismo son Córdoba (75%), Sevilla (70%), Málaga y Toledo (67%) y Cádiz (64%) . Es decir, Andalucía se proclama como uno de los destinos preferidos del verano y la provincia de Cádiz en quinto lugar a nivel nacional.

Estos datos se reafirman con los Juan Carlos Tamayo, vicepresidente de la Asociación de Turismo Rural CIT de la Sierra de Cádiz. Tamayo señala que «que las expectativas de turismo en la Sierra de Cádiz para este verano se están superando gracias en gran parte a turistas de Málaga, Sevilla y Cádiz». Tamayo considera que la provincia de Cádiz, por el número bajo de contagios respecto a otras zonas de España, «está funcionando como destino refugio».

Desde la Asociación de Turismo Rural gaditana explican que el alojamiento turístico más demandado son las casas rurales que tengan piscina. Es fundamental este punto. Asimismo, en cuanto a los alojamientos hoteleros, se mantiene la tendencia positiva. «En mi caso en particular, explica Tamayo -quien también regenta un el Hotel del Carmen en Prado del Rey-, en julio hemos tenido la misma ocupación del año pasado. Esto supone que hemos superado las expectativas porque pensaba que iba ir peor. Además, según me comentan de otros hoteles también están llenos».

La peculiaridad de este verano es el cambio de tendencia en la previsión vacacional. Ya no se hacen reservas a largo plazo. «Todas las reservas son a última hora y destacan las estancias cortas », comenta Tamayo. «Yo calculo que muchos clientes o no se han ido de vacaciones o las han modificado y lo que hacen es aprovechar el fin de semana para hacer pequeñas escapadas», añade.

En este sentido, se confirma que el perfil generalizado del turista en la Sierra de Cádiz está siendo de la propia Comunidad Autónoma. El vicepresidente de la Asociación de Turismo Rural CIT de la Sierra de Cádiz comenta que la clientela que están recibiendo es «el 80% de Sevilla, Málaga y Cádiz, mientras que el 20% restante del resto de Andalucía». En cuanto a las reservas de los clientes extranjeros, que tradicionalmente tienen una gran presencia en la Sierra de Cádiz, este año se han cancelado a causa del Covid-19 y la alerta sanitaria que sigue presente en España. «Al menos el turista español está respondiendo en la zona», comenta Tamayo.

Cádiz no es solo turismo de playa . La Ruta de los Pueblos blancos con las la Sierra de Grazalema -declarada Reserva de la Biosfera por la UNESCO y con el mayor índice pluvial de España- y el Parque Natural de los Alcornocales hacen que los ‘turistas de interior’ puedan disfrutar del contraste que ofrece la provincia.

Entre estos dos espacios naturales se esconden enclaves únicos con asentamientos ibéricos, fortalezas, murallas o castillos medievales que se mezclan con la oferta gastronómica propia y de turismo activo.

Juan Carlos Tamayo comenta que «nosotros tenemos socios en la Asociación que son empresas de turismo activo y nos están mandando calendario de actividades y están funcionando bien».

Visitantes de las localidades de Arcos de la Frontera, Bornos, Villamartín o Zahara de la Sierra , entre otros, pueden disfrutar de actividades acuáticas como paddle surf, rutas en kayaks en el lago de Bornos o en el de Zahara-El Gastor disfrutando de un paisaje idílico.

Como todos los sectores, las empresas dedicadas al turismo activo temían la respuesta de los turistas a raíz de la crisis sanitaria generada por el Covid-19. En este sentido y respecto a la afluencia de turistas de este verano explica que «no tenemos datos de cómo va la ocupación en julio comparado con el año pasado pero al menos sabemos que sí están funcionando y de forma personal, en el hotel, los clientes sí que nos demandan este tipo de actividades. Es verdad que no al nivel de otros años pero sí que nos piden rutas a caballo, senderismo o canoas, entre otras actividades», comenta Tamayo. Además, «una opción muy interesante para este años es una programación para hacer canoas las noches de luna llena en el embalse de Bornos», añade. Esta actividad , que resulta muy atractiva para todos los visitantes se puede realizar a través de Horizon Aventura.

Esta empresa, con un bagaje en el sector desde 1994 está especializada en turismo activo en la provincia. Entre sus servicios ofrecen barranquismo, rutas de senderismo, canoas, espeleología o vías ferratas en el entorno de la Sierra de Grazalema y de los Pueblos Blancos que la rodean.

Para las personas más atrevidas y que quieran disfrutar del paisaje que ofrece la Sierra de Cádiz desde el cielo, hacer parapente o volar en avioneta es posible. El pueblo que por excelencia se ha convertido en la base de los deportes aéreos de la provincia es Algodonales. Allí, empresas como Zero Gravity se han erigido como una escuela internacional de parapente y Centro de Vuelo. Con sus instructores, se puede realizar un vuelo biplaza desde el que observar los pantanos y los pueblos de la serranía gaditana a vista de pájaro. Asimismo, desde el aeródromo de Villamartín, que cuenta con una escuela de pilotos, se pueden realizar rutas aéreas en avioneta.

Sin duda, Cádiz no es solo sol y playa. Cádiz es historia, la historia de sus pueblos, su gastronomía, su sierra y su gente. Un escenario perfecto para adentrarse más allá de la arena y el mar y dejarse llevar para disfrutar de cada rincón que ofrece la provincia. Opciones no faltan bien sea para una escapada de fin de semana o para unas vacaciones duraderas.

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