'Pollazo', un bocadillo de groseras dimensiones que se elabora en San Fernando

Bocadillos por los que merece la pena dejar la cuchara y el tenedor aparcados. El bocata (no hablamos del invento «blandengue» de John Montagu con su ‘ sandwich ’) es cultura gastronómica patria y, en verano, se convierte en uno de los grandes protagonistas de las excusiones por su rápida y fácil elaboración y por el placer que provoca degustar un bocadillo bien hecho, contundente. Un gustazo por el que merece la pena mancharse y chuparse los dedos.

En Madrid, el bocata ' de calamares ' reina incontestable; el ‘ serranito ’ con su lomo, jamón y pimiento verde es un símbolo para Sevilla; tampoco se puede olvidar el ‘ campero’ de Málaga ; y las variantes de la ‘ catalana ’, jamón con tomate o ‘pan tumaca’ cuya paternidad tantos se atribuyen. La lista es extensa y estos cuatro ejemplos son sólo un aperitivo dentro de la gran varidad combinaciones que existe en España. Sin embargo, hoy haremos parada y fonda en un bocadillo gigante de llamativo nombre y groseras dimensiones que está dando mucho que hablar en San Fernando: 'Pollazo'.

El restaurante Sancho Panza ha incluido en su carta este colosal bocado que complementa el pan rústico con pollo empanado, patatas fritas, huevo, magreta y salsa.

El 'Pollazo' ha sido elegido como uno de los 50 mejores de España por una publicación especializada . ¿Quién se atreve a hincarle el diente?