La afición se cansa también de lo deportivo

El Villarreal ha vencido por tres goles a cero en El Sardinero en un encuentro dominado de principio a fin por el conjunto castellonense, que fue muy superior y no dio ninguna opción a un Racing inmerso en una profunda crisis deportiva e institucional.

Se encontraban en El Sardinero dos exprimeras llamados a estar en los puestos altos de la clasificación, aunque antes del partido la realidad de la clasificación situaba al Racing rozando los puestos de descenso y al Villarreal sin haberse adaptado del todo a la categoría a pesar de su teórico potencial.

Pronto el Villarreal se hizo con el control del balón, pero este dominio no se traducía en ocasiones de gol, excepto un par de tiros desde fuera del área.

La primera ocasión clara no llegó hasta el minuto 22, en un tiro de Jaume desde dentro del área, tras una gran jugada trenzada del conjunto amarillo, que Sotres atrapó bien.

Esta ocasión pareció dar alas al Villarreal y en los siguientes minutos los acercamientos del equipo castellonense al área del Racing se intensificaron en busca del primer gol del partido.

Tanto fue el cántaro a la fuente que, finalmente, en el minuto 32, Manu Trigueros, después de zafarse de un par de rivales, batió a Sotres con un gran lanzamiento desde la frontal del área.

Lejos de conformarse, el Villarreal continuó buscando la portería rival y, apenas cinco minuto después, el nigeriano Uche logró el segundo tanto del submarino al definir en el área pequeña una excelente jugada de Jaume iniciada desde la banda izquierda.

El segundo gol despertó tímidamente al Racing, que hasta el momento había estado todo el rato encerrado en su campo, y, a punto de llegar al descanso, dispuso de su primera ocasión en un doble remate de Gullón, que paró muy bien Marino con el pie, y Jairo, que disparó fuera con todo a favor.

La segunda parte comenzó con un grave error de Sotres que estuvo cerca de provocar el tercer gol del Villarreal, pero el cancerbero rectificó su fallo con una buena intervención para detener el tiro de Manu Trigueros.

El partido continuó con la misma tónica que en la primera mitad y la clara superioridad del Villarreal se certificó en el minuto 52 con el tercer gol del encuentro, obra de nuevo de Uche, que remató con la cabeza, de manera impecable, un centro medido de Cani desde el costado derecho del área.

Con el partido totalmente sentenciado, lo más trascendente en los siguientes minutos fueron los continuas protestas y algunos incidentes que se produjeron en la grada por parte de los aficionados del Racing que, una vez más, volvieron a mostrar su disconformidad con los actuales dirigentes del club.

En los últimos minutos del partido, con la grada algo más calmada, el Racing pudo recortar distancias, sobre todo con un lanzamiento al palo de Koné, aunque también el Villarreal estuvo a punto de aumentar su ventaja en dos claras ocasiones en las que Hernán no estuvo acertado de cara a gol.