PROTESTA

Cinco tibetanos tratan de inmolarse en protesta por la ocupación china del Tíbet

La última ola de inmolaciones coincide con el arranque del 18º Congreso del PCCh

MADRID Actualizado: Guardar
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Cuatro tibetanos se han prendido fuego para protestar por el dominio chino sobre la región autónoma, de los cuales dos han fallecido y dos se encuentran heridos, según ha informado el grupo humanitario Free Tibet en sendos comunicados. La última ola de inmolaciones coincide con el arranque del 18º Congreso del Partido Comunista chino

Por un lado, los monjes tibetanos Samdup, Dorjee y Dorjee Kyab, de entre 15 y 16 años de edad, se han quemado a lo bonzo para exigir la libertad de la región autónoma y el fin del exilio de su líder espiritual, el Dalai Lama. Como consecuencia de ello, Dorjee ha muerto y sus dos compañeros, Dorjee Kyab y Samdup, han resultado heridos. Al parecer, las autoridades chinas los han trasladado a un hospital local, pero se desconoce su estado de salud. Los tres pertenecen al Monasterio de Ngoshul, ubicado cerca del Condado de Ngaba, en el noroeste de Tibet, donde ha tenido lugar la serie de inmolaciones que se han producido en el último año por idénticos motivos.

Se trata de la primera inmolación múltiple que se produce en la región autónoma, por lo que las autoridades chinas han procedido inmediatamente a acordonar la zona y han endurecido las medidas de seguridad en el Condado de Ngaba.

Por otro lado, Tamdin Tso, una tibetana de 23 años de edad y madre de un niño de cinco, se ha prendido fuego por la misma razón y a causa de ello ha fallecido. El suceso ha ocurrido en la localidad de Rongwo, ubicada en el condado de Rebkong, en el este de la región autónoma.

La inmolación como protesta

En el último año se ha producido un auge de esta forma de protesta, que se da, sobre todo, entre menores de 25 años de edad, que han nacido y crecido bajo lo que consideran la ocupación china. Ya han muerto decenas de personas.

Las autoridades del régimen comunista han condenado las inmolaciones en Tibet, subrayando que atentan contra la moral china, y han acusado al Dalai Lama de promover estos actos con el fin de desestabilizar el país. Sin embargo, no es la única forma de protesta de los tibetanos. En los últimos meses se han atrevido a manifestarse y a lanzar panfletos para denunciar el dominio chino, actos por los que pueden ser encarcelados y torturados, según la ONG.