Falta de visión

La mayoría de los españoles aguantan lo indecible antes de ir al médico. Así, tres de cada cuatro españoles no acuden al especialista hasta que no pueden aguantar más y necesitan que les gradúen las gafas que llevan o cambiar de lentillas. Un problema que se ve aumentado porque los españoles nos limitamos a hacer una revisión anual. Solo el 22% de las visitas que se realizan a la óptica se corresponden con una revisión general de la salud visual, según ha comentado la Fundación Federópticos con motivo de la celebración del Día Mundial de la Vista.

Y eso que más de la mitad de la población española necesita algún tipo de corrección visual y que al 69% de los españoles mayores de 45 años le cuesta leer la letra pequeña de los medicamentos o que un millón de niños españoles padecen el mal del ojo vago o ambliopía, ha indicado por su parte el Instituto Varilux. Además el 80% de la información que recibimos del mundo es a través de nuestros ojos y el cerebro humano dedica el 40% de su actividad a la visión. La utilidad de las revisiones abarca más allá de la detección de la miopía, hipermetropía, astigmatismo y presbicia. A partir de los 55 años, las personas se muestran más propensas a sufrir una serie de problemas de visión asociados al paso de los años, como son las cataratas, la degeneración macular asociada a la edad (DMAE), la retinopatía diabética, el desprendimiento de retina o el glaucoma.

En este último caso, la mitad de los pacientes con glaucoma no sabe que lo tiene hasta que ha perdido gran parte del campo visual. El estudio anteriormente citado apunta que la pérdida de visión debido al glaucoma es irreversible, pero se puede prever o ralentizar su progresión con el tratamiento adecuado. Precisamente en la prevención ha incidido el presidente de la Fundación Retinaplus+, Francisco Gómez Ulla, quien ha destacado que el 80% de las discapacidades visuales podrían evitarse si la enfermedad se detecta y trata a tiempo. Asimismo, ha lamentado que solo tres de cada diez diabéticos acuda a revisarse su vista y, de esta manera, no se pueda evitar una retinopatia diabética, entre otras enfermedades.