Parques y Jardines
VIDEO: Prácticas «salvajes» para comprobar la resistencia de árboles y palmeras de Cádiz
El comité de empresa de Acciona rechaza estos trabajos y pide al Ayuntamiento su paralización inmediata ya uqe suponen «un maltrato contra el patrimonio vegetal de la ciudad»
El comité de empresa de Acciona, concesionaria del servicio de mantenimiento de Parques y Jardines de la capital gaditana, ha denunciado las prácticas «salvajes» que se están llevando a cabo en Cádiz para comprobar la resistencia de palmeras y árboles.
Con la llegada de los temporales de invierno, uno de los principales problemas que todos los años se repiten en todas las ciudades es la caída accidental de algún árbol a causa de los fuertes vientos, especialmente los más deteriorados o enfermos.
Aseguran desde el comité que, para prevenirlo, «el personal técnico de la gran mayoría de los ayuntamientos recurre durante los periodos de verano a la realización de estudios de resistencia mediante técnicas específicas como, por ejemplo, la resistografía o la tomografía del arbolado por parte de empresas especializadas».
Lamenta que Cádiz, a estos efectos, «debe vivir, al parecer, en plena prehistoria de la jardinería municipal, ya que desde hace varios días y por expresa indicación, al parecer, del técnico de jardines de nuestro Ayuntamiento se ha puesto en marcha una campaña de realización de pruebas de esfuerzo sobre árboles y palmeras».
Según manifiesta el comité de empresa, los pasos a seguir son los siguientes: se selecciona el árbol o la palmera sobre la que se vaya a actuar; se le ata el extremo de una larga soga al espécimen vegetal cuya «resistencia» vaya a probarse; se les indica a tres o cuatro trabajadores de Jardines que tiren con fuerza del otro extremo de la cuerda; y finalmente,« se espera a ver si el árbol o la palmera cae directamente sobre el suelo (o sobre lo que coja por delante en su caída) o si, por el contrario, se mantiene erguido ».
Desde el Comité de Empresa de Acciona muestran «nuestro más profundo malestar y rotundo rechazo con esta labor que se nos ha encomendado por parte del técnico municipal de Parques y Jardines de la ciudad, ya que, además de ser una práctica absolutamente nada ortodoxa , su ejecución conlleva numerosas consecuencias muy negativas».
Riesgo para el patrimonio y trabajadores
En primer lugar, declaran los trabajadores, «supone un maltrato evidente para el patrimonio vegetal ».
Por otro lado, «denota un menosprecio tremendo hacia el mobiliario urbano por la violencia que suele presentar la caída (ya se han derribado, al menos, dos ejemplares de Phoenix dactylifera mediante el empleo de la fuerza bruta)».
Asimismo, «supone un riesgo evidente para los trabajadores/as de accidente para los trabajadores/as que realizan la maniobra».
Y, además, es una práctica que, «en lugar de evitar futuras caídas de especímenes por los temporales de invierno, lo que puede estar haciendo, en el fondo, es provocar mayores caídas porque las palmeras que han soportado en pie el 'jalón' de los operarios puede haber visto dañada su estípite interior y ser, por tanto, más vulnerables aún a futuros temporales».
En consecuencia, desde el comité de empresa exigen la «paralización inmediata de esta salvaje práctica ; su sustitución inmediata por un estudio técnico serio y riguroso; y, finalmente, que se separe por favor de sus labores gestoras al técnico municipal de jardines antes de que arrase con todo el arbolado que tenemos en nuestra ciudad».
