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Concluye la investigación por el saqueo de libros históricos de la Celestino Mutis

Más de un centenar de tomos, algunos declarados BIC, fueron sustraídos de la biblioteca municipal de Cádiz durante 2011

silvia tubio
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Un empleado de la limpieza y un coleccionista forjaron una alianza en 2011 para la sustracción masiva de libros antiguos de la biblioteca municipal de Cádiz Celestino Mutis.

La Policía Nacional dijo de la ‘operación Micenas’, que había sido la investigación de patrimonio más importante que había ejecutado en los últimos años. Un caso que acabó con la detención de una extraña pareja de ladrones aficionados y que ponía en evidencia los nulos sistemas de seguridad y vigilancia en unas dependencias públicas que guardan joyas encuadernadas, algunas de ellas declaradas Bien de Interés Cultural (BIC).

La investigación judicial llevada a cabo en el juzgado de Instrucción nº 4 de Cádiz ya ha concluido y los dos imputados se enfrentan a una petición de dos años de cárcel formulada por la Fiscalía por la comisión un delito continuado de hurto, agravado por el valor de la mercancía (superior a los 400 euros), y a que se tratan de piezas artísticas.

La extraña pareja

A Manuel D. R., la Fiscalía lo considera el autor de la sustracción de los libros. En el escrito de acusación, el Ministerio Público expone que esta persona acudía desde 2010 a la biblioteca municipal para realizar labores de limpieza. Si bien, la que tenía un contrato para la ejecución de esas tareas era su mujer.

Gracias a ese trabajo pudo tener libre acceso a las dependencias de la biblioteca y a los tesoros que ésta guarda. A finales de 2010, el otro acusado, José Luis V. G., contactó con Manuel D.R. en el puesto ambulante de libros que éste montaba en el parque Genovés.

José Luis sabía del trabajo que desempeñaba Manuel en la biblioteca y le convenció –sostiene el fiscal– para que comenzara a sacar libros históricos que él mismo le señalaba. La Fiscalía lo acusa de ser el inductor en el saqueo de fondos de la biblioteca.

A cambio de cada obra, el coleccionista le pagaba «una cantidad irrisoria» al vendedor ambulante, quien llegó a tener en sus manos libros valorados en su conjunto por encima de los 18.000 euros. Él, sin embargo, recibía menos de diez euros en cada entrega.

La Policía describió a José Luis V. G. hace tres años, cuando fue arrestado, como un gran amante del arte y del coleccionismo de armas y documentos. Cuando registraron su casa y dos locales que tiene en El Puerto, tuvieron que buscar medios para sacar las 700 piezas que le fueron intervenidas en un primer momento hasta que demostrara su legal procedencia.

Además de libros, los agentes le requisaron lacres, un capitel, un ánfora procedente de un expolio subacuático, charreteras y multitud de espadas y armas como una conmemorativa de la Constitución de 1812. Una pieza que fue obsequio a los diputados de las Cortes que participaron de la redacción de la Carta Magna.

La cifra de volúmenes que supuestamente la pareja sustrajo durante varios meses enfrentó las versiones de la Policía Nacional con la del Ayuntamiento de Cádiz.

Desde el Cuerpo Nacional cifraban en 373 libros de alto valor histórico los que habrían salido por la puerta de atrás de la Celestino Mutis y habían sido recuperados. Señalaban, además, que había alguna pieza que databa del siglo XVI.

Mejor destino que 'Los Mojosos'

El Ayuntamiento respondió rebajando ese dato a 220 y negando que hubiera volúmenes tan antiguos. No era la primera vez que el Consistorio tenía que salir a la palestra para explicar la pérdida de piezas de su patrimonio local.

Por suerte, más de un centenar de obras de la Celestino Mutis regresaron a sus estanterías; todo lo contrario que ‘Los Mojosos’, que desapareció en 2007 de la Fundación Gaditana del Carnaval y aún no se sabe nada del cuadro de Costus.

Ninguno de los datos aportados por la Policía o el Consistorio coinciden con el que esgrime la Fiscalía en su escrito y tras concluir una instrucción que ha contado con el peritaje de tasadores. El Ministerio Público enumera 109 volúmenes con un valor total de 18.154 euros.

Las obras más antiguas son del siglo XVIII y algunas están clasificadas como BIC. Es el caso del ‘Estudio histórico crítico sobre el sitio de Cádiz por las Tropas de Napoleón’ de Manuel Quintero Atauri y fechado en 1912 o ‘El Reglamento del Regimiento de Infantería de Línea de Voluntarios Distinguidos de Cádiz’, del año 1811.

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