cultura

Najwa Nimri: «Hemos sufrido una caída dura, lo que apetece es pasarlo bien»

«No me considero muy terrenal», asegura la intérprete, que esta noche baja a Cádiz para inaugurar la octava edición de ’South’

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Ella misma reconoce que cambia mucho, a diario, que «no se considera de ninguna manera». El martes, día de esta entrevista, la actriz y cantante Najwa Nimri lo demostró en apenas 20 minutos de conversación. A veces simpática, otras distante, a ratos agradable, otros los hacía incómodos con sus respuestas. Alegre se mostró cuando se le preguntó por Cádiz –donde empezó con Carlos Jean– , por lo que le inspira y le divierte. Esta noche vuelve para inaugurar con una actuación musical la octava edición del festival ‘South’.

–Su gusto por la moda y las nuevas tendencias no es nuevo, quizá por eso la hayan elegido para inaugurar ‘South’...

–Bueno sí, debe de ser por eso. Lo de la moda, no sé, últimamente voy en chándal a todos lados.

–¿Qué es lo que va a traer a Cádiz?

–Un set de Dj con voz. Voy a cantar con el productor y teclista de Brazilian Girls, un grupo que se hizo conocido en Nueva York. Pinchamos parte de nuestras bases cantando yo, experimentaremos con lo que será parte del próximo disco.

–Usted aclara que no es una famosa metida a Dj.

–Yo antes hacía música electrónica con Carlos Jean, con 19 años, y ahora tengo 41. Por eso no creo que sea una famosa que se mete a Dj, sino que empecé haciendo eso y cuando me ofrecieron que lo hiciera por dinero, jamás lo cogí. No suelo pinchar mucho, doy conciertos, lo que me gusta es cantar. Voy jugando yo con mi voz y otra persona con las bases. No voy como el hijo de la Pantoja, que coge temas de otros y los va poniendo uno tras otro. Nos preocupamos de hacer un montón de bases, la producimos y yo canto encima. Lo que me apetece es ir probando cosas.

–Entonces, este concierto le sirve de laboratorio.

–Sí, aprovechamos todas las actuaciones de laboratorio. Ahora estamos probando qué es lo que nos mueve y gusta.

–¿Con qué se queda para los discos, con lo que más le gusta a usted o con aquello con lo que más vibra el público?

–Antes, el contacto con el público y hacer Cd’s y conciertos no era necesario porque había más medios para hacer un disco. Ahora, como tienes que estar enfrentándote al directo mucho antes para producir el disco pues vas viendo inevitablemente lo que le va gustando al público. Lo que hay que hacer es aprovechar ya que tienes que tocar más, muchas veces por gusto pero otras por subsistencia.En estos encuentros puedes ir testando lo que le gusta al público. De todas maneras, en mi caso, no surge todo de un plan premeditado, sino que es más espontáneo, van surgiendo retos.

–El anterior trabajo, ‘Donde rugen los volcanes’, partió del «no funcionamiento de lo que garantizaba nuestro futuro». ¿Seguirá el próximo la misma línea?

–Ha surgido de tres personas que se han juntado para pasárselo bien y ya está. Es un disco mucho menos mental que el anterior.

–Con ese disco se popularizó el concepto hipnosis-patada, ¿sirve su música para despertar?

–La música acompaña en todos los momentos, en los malos y en los buenos, en los que necesitas esperanza, en los que necesitas llorar... De ahí pienso que la música le ayuda a todo el mundo. Lo del despertar o no yo creo que ya nos han despertado. Ha sido una caída dura, así que básicamente lo que apetece es pasárselo bien.

–Quizá esa nunca ha sido su intención...

–Me emociona y me siento bien cuando consigo llegar con mis letras o mis discos, o le ayuda a la gente en alguna medida. Me gusta que sirva para algo, me compensa. Pero otras veces lo hago simplemente como una válvula de escape, lo necesito como todo el mundo.

–¿Por qué ahora de nuevo el inglés?

–Espontáneamente me cuesta menos en inglés, unir las palabras para que se entienda de la manera adecuada me es más fácil que en castellano. Sin embargo, en los dos anteriores discos, conseguí expresar lo que quería expresar en español.

–Está a tope con la electrónica pero, ¿le gustaría explorar nuevos géneros?

–Hago acústicos de vez en cuando, aunque mi hábitat es la música electrónica, de computadora. Para mí no es más que el vestido que le pones a una canción y puede ser de mil maneras. He hecho una banda sonora de clásico, estoy permanentemente haciendo otras cosas.

–Dijo alguna vez que no era moderna, sino de ciencia-ficción...

–No recuerdo de dónde viene eso. Yo no me miro al espejo y digo a ver cómo soy más moderna hoy, no. Veo lo que veo, me rodeo de lo que me rodeo y eso al final me afecta. Me considero una persona bastante dentro del cauce, estoy aquí trabajando con un grupo de gente preparando una especie de guión para un futuro...

–¿Y muy terrenal?

–No tampoco me considero así. Es que no sé como me considero, siempre digo que cada día de una manera, cambio mucho.

–De entre todo lo malo a lo que estamos asistiendo, podrá extraer algo positivo...

–No queda otra que sólo la imaginación provocará el resurgimiento. Sólo queda sitio para las grandes ideas.Creo que saldrá un montón de gente bastante brillante imaginándose cosas muy potentes, sacando el brazo por otros sitios con cosas sorprendentes.

–¿Qué es para usted la vanguardia?

–(Al otro lado del teléfono, Nimri le pregunta a un compañero por el significado de la palabra). Para mí lo que significa una palabra que ya tiene significado es lo que dice la palabra.Vanguardia, lo que va delante. A mi me gustaría pensar menos en lo que va a venir y aprovechar más el día o día. Ver el futuro cuando no puedes ver mes a mes es complicado.

–¿Para cuándo su vuelta al cine?

–A ver si en septiembre sale la película que estoy esperando y empezamos a rodar, me apetece mucho.

–¿Considera que en el cine es más o menos selectiva que con la música?

–Sí, digamos que soy selectiva. Bueno, más que eso decido lo que hago, aun a riesgo de no ganar mucho dinero.