calle larga

...Y el lobo entero

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Para los que tuvieron la paciencia de leer mi columna de la pasada semana entenderán que la de hoy es una continuación de la misma. Y para los que no, les explicaré que la titulaba ‘Las orejas al lobo’ haciendo alusión a la preocupante situación del Xerez. Quiero comentarles que lo que de alguna manera me temía se ha hecho realidad. Y esta realidad es que el Xerez está a un tiro de piedra del descenso, a tres puntos, a un nuevo traspiés que por desgracia bien pudiera producirse –Dios no lo quiera– ante un correoso y experto Numancia. Para ganar es poco bagaje jugar bien durante veinte minutos. Por desgracia, los encuentros suelen durar 90 y no se puede tirar un primer tiempo como el que tiró el equipo en Valladolid. Lo que advertía la semana anterior es que caer en una dinámica de resultados adversos como la actual suele ser muy peligrosa y se dan casos como el pasado año el Tenerife, que con una gran plantilla y hasta cinco entrenadores, cinco, la cosa no tuvo arreglo y está con sus huesos en la temida 2ª B en la que cayeron equipos como el Oviedo, Burgos y otros muchos, sin ir mas lejos nuestro vecino amarillo. Lo que se tenga que arreglar que se arregle ahora, que todavía estamos a tiempo. Y cuidando con los parches, porque esos solo suponen que el remedio definitivo pueda llegar demasiado tarde. Como verán no digo nombres, solo situaciones, y lo mas preocupante es que ¿quién tiene que tomar la decisión? ¿Unos consejeros que ellos mismos reconocen son de transición y que su poder es poco menos que puramente figurativo, o unos administradores concursales que tienen las manos atadas con el presupuesto según todos prácticamente gastado. Aunque no olvidemos que hace dos temporadas hicieron un esfuerzo de 600.000 € (de los cuales volaron 500.000 para la tierra del tango) para no descender de Primera. Paris bien vale una misa, y en esta ocasión y para el mismo concurso, bien valdría ese esfuerzo –aunque deje luego con mayor acierto–, ya que cerrar un acuerdo con los acreedores es sumamente mucho mas difícil sin la garantía de estar al menos una temporada más en la División de Plata.