Tirotean a la selección de Togo

Nos han acribillado como a perros. Hemos pasado veinte minutos debajo de los asientos del autobús. Estaban encapuchados y armados hasta los dientes. A tres jugadores les han alcanzado disparos en el estómago. Estamos en el hospital. Es una locura». Thomas Dosevvi, internacional de Togo, firma este espeluznante relato. El futbolista del Nantes narra el horror padecido por su expedición al sorprenderle un tiroteo cuando se dirigía a la ciudad angoleña de Cabinda, sede del Grupo B de la Copa de África que arranca mañana. El primer balance habla de un muerto, el chófer del vehículo, y seis heridos, entre ellos tres futbolistas, aunque las informaciones son contradictorias.

«El ataque terrorista», definición de un ministro angoleño, se produjo poco después de que el autobús cruzase la frontera que separa la República de Democrática del Congo de la sede del torneo africano. Al entrar en la región de Cabinda, un enclave que lucha por su independencia, núcleo de grandes extracciones petrolíferas, levantada en armas contra el partido gobernante desde el final de la Guerra Civil, en 2002, les sorprendió un grupo de rebeldes. Tiros por todos los sitios a primera hora de la tarde. «El ataque ha sido brutal», relatan varios testigos de la acción.

Al cierre de esta edición, la selección de Togo no había decidido aún si tomará parte en la Copa de África, en la que debía debutar el lunes con un duelo frente a Ghana. «Aún no hemos reflexionado sobre las posibles opciones, pero ahora mismo nadie quiere jugar. No somos capaces. Ahora sólo pensamos en la salud de los heridos porque había mucha sangre en el suelo», se inquieta Dosevvi.

El futbolista del Nantes es uno de los pocos que podía articular palabra después del sorprendente ametrallamiento, que se produjo a pesar de las medidas de seguridad que acompañaban a la selección. «Aunque sólo había dos coches de policía», denuncia Dosevvi. Y nada pudieron hacer para detener la masacre. De hecho, la estrella de la selección, Emmanuel Adebayor, que resultó ileso, confirmó el Mancheshester City, su club, rompió a llorar al observar las pavorosa visión que había a su alrededor.

Según el jugador del Nantes francés, uno de los países que más profesionales aporta a este torneo, los heridos son el guardameta Kodjovi Obilalé, del GSI Pontivy galo, de cuarta división, y el defensa Serge Akakpo, del Vaslui FC rumano, en Primera. El resto de los afectados serían otro jugador, un ayudante del entrenador, un médico de la delegación y un periodista.

Éxodo en Europa

Con este ataque de veinte minutos, los rebeldes toman el protagonismo en las horas previas al comienzo de la Copa de África, que arrancará mañana. Y provocan un mayor temor en los ya molestos equipos europeos por la obligatoriedad de ceder jugadores para que disputen esta competición.

Y es que hombres como Didier Drogba y Michael Essien (Chelsea), Samuel Eto'o (Inter), el sevillista Frederic Kanouté, y los azulgranas Yaya Touré y Seydou Keita, han tenido que dejar la displicina de sus conjuntos para unirse con sus selecciones a un torneo que acabará el 31 de enero, y que tiene a Costa de Marfil como principal favorito.