Sociedad

«Mi paisaje favorito está cerca del mar y contiene en él muchos desiertos»

Aseguró ayer que trabaja en su próxima novela desde hace dos años

JEREZ Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

-El tema del congreso de la Fundación Caballero Bonald de este año es la relación entre la literatura y la naturaleza, ¿cuál es su opinión?

-A través del paisaje hemos descubierto lo que somos, lo que sentimos, nuestras ilusiones y prejuicios: el mundo natural como una proyección de la subjetividad humana. Lamento no haber podido asistir a las otras comunicaciones del congreso pero lo que ha dicho Senabre me ha parecido muy interesante: el paisaje literario no es nunca el paisaje natural sino siempre un paisaje subjetivo del que se valen escritores y poetas para volar su intimidad, para graficar sus sentimientos, pasiones e instintos».

-¿Cuál es su paisaje literario favorito?

-El que esté más cerca del mar y que contenga en él muchos desiertos. Yo nací en la sierra, en los Andes, y quizás por eso cuando vi el mar por primera vez a los diez años, me quedé marcado. Nunca he olvidado la impresión de ese mar enorme, con olas reventando sobre unas larguísimas playas de arena. Si tengo que elegir un paisaje me quedo con el mar y el desierto.

-¿Qué le parece que Jerez le dedique una calle?

-Me parece muy honroso. Cuando anoche me dieron la noticia, me quedé conmovido pero también un poco asustado porque tener una calle es como tener una lápida en vida. Será un motivo para venir muchas veces a ver cómo cuidan mi calle en Jerez.

-¿Tendremos pronto una nueva obra de Vargas Llosa?

-Sí, llevo cerca de dos años trabajando en una novela, aunque no sé cuándo la terminaré.

-¿Cree que el libro electrónico puede ser una amenaza para el libro tradicional en papel?

-Creo que es una realidad de nuestro tiempo. Es algo irresistible, que crece y que espero que no llegue a sustituir al libro en papel. Yo soy un producto del libro en papel y no imagino una literatura solo en pantallas. A mí me parecería un gran empobrecimiento. Lo ideal es que ambas coexistan, que el libro de papel no sea remplazado por el electrónico, pero creo que es una realidad que crece con una fuerza irresistible. Creo que tendrá efectos sobre la naturaleza de la literatura. No será lo mismo la literatura en el libro de papel que en las pantallas y probablemente experimentará un proceso de simplificación. Habrá un aspecto puramente visual que, si no a prevalecer, se va a acentuar mucho más en el libro electrónico y ojalá eso no signifique un empobrecimiento intelectual pero es una realidad de nuestro tiempo que está ahí. Lo que deberíamos tratar es que el libro de papel no desaparezca aplastado. No creo que sea así pero sí podía llegar a convertirse en una realidad de catacumbas. Quizás si ocurre eso, el libro de papel ganará en rigor y excelencia frente a un libro más popular y por eso mismo, menos profundo y riguroso de lo que ha llegado a ser el libro de papel.