Trabajadores franceses amenazan con destruir su fábrica si no los indemnizan

El secretario del comité de empresa y delegado de la Confederación General del Trabajo (CGT), Guy Eyermann, ha explicado este lunes en unas declaraciones a la emisora "France Info" que los trabajadores del fabricante de piezas para el automóvil New Fabris han colocado bombonas de gas conectadas entre ellas en la factoría que permitirían hacer volar las instalaciones. Eyermann ha señalado que cumplirán su amenaza de hacer volar la fábrica si de aquí al próximo día 31 no obtienen de Renault y PSA Peugeot Citroen un acuerdo para el pago de 30.000 euros para cada uno de los 366 empleados a cuenta de las existencias y de la maquinaria que hay todavía en Châtellerault.

Renault y PSA Peugeot Citroen han indicado que no les corresponde a ellos el pago eventual de indemnizaciones sino que son los accionistas y la administración judicial los que tienen que decidir al respecto.

El monto de la indemnización que reclaman los trabajadores, según los sindicatos, se basa en primer lugar en las que recibieron otros 200 trabajadores del grupo Rencast -especialista de la fundición en aluminio- al ser despedidos. Además, afirman que los fabricantes automovilísticos han evaluado el valor de las piezas ya fabricadas y almacenadas en los locales de New Fabric en dos millones de euros, a lo que se sumaría una máquina nueva de Renault de un valor similar.

La empresa fue declarada en liquidación judicial el pasado 16 de junio tras haber estado durante algo más de medio año en manos del grupo italiano Zen, al que había sido atribuida a finales de año por decisión judicial. Los trabajadores han estado ocupando de forma permanente las instalaciones y tienen programado un encuentro el próximo día 20 con el ministro de Industria, Christian Estrosi.

La semana pasada un numeroso grupo se trasladó a la sede de PSA y otro hará lo mismo con Renault el próximo jueves.

Alternativas a la crisis

Esta no es la única vez que trabajadores de una empresa en quiebra recurren a acciones o amenazas radicales por conseguir indemnizaciones o evitar despidos desde que estalló la crisis. También en Francia, el pasado marzo trabajadores de la empresa estadounidense 3M mantuvieron retenido en sus oficinas al director industrial de la compañía en señal de protesta contra los planes de despido. Los trabajadores de la fábrica de Sony de Pontonx-sur-l'Adour, en las Landas, al suroreste de Francia, utilizaron los mismos métodos para obtener indemnizaciones con motivo del cierre de la factoría.