Las cinco fragatas que componen la dotación SNMG-1 de la OTAN estaban ayer atracadas en el puerto de la base naval de Rota. / O. CHAMORRO
Ciudadanos

La Bahía acoge la mayor flota desplegada por la OTAN para luchar contra la piratería

La organización internacional organiza una serie de demostraciones para celebrar su Día Marítimo El portaviones norteamericano 'Eisenhower' será el gran atractivo de las operaciones que se realizarán hoy

| ROTA Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Rota se ha convertido en el centro neurálgico del mando de la Agrupación Marítima de la OTAN número 1 (SNMG-1) con un total de cinco embarcaciones a lo que hay que sumar el portaviones norteamericano Eisenhower, lo que hace que en los alrededores de la Base Naval se encuentren cerca de 7.250 militares desplegados con el objetivo de mostrar las operaciones tácticas desarrolladas en el Cuerno de África para luchar contra la piratería.

El motivo de que la Bahía sea hoy uno de los enclaves con mayor despliegue de naves de asalto es porque la organización internacional ha elegido la Base Naval de Rota para la celebración de su Día Marítimo, una conmemoración de carácter anual en la que se realizará una serie de demostraciones aeronavales en las que también participarán helicópteros Fast rope, y un equipo de abordaje. Además, de llevarse a cabo una ceremonia de banderas e himnos de las naciones participantes en la SNMG-1.

Pero no sólo existe un amplio despliegue militar, sino que también será importante la representación de altos cargos que presenciarán las operaciones. El secretario general de la Alianza Atlántica, Haap de Hoop Scheffer, los representantes permanentes en el Consejo del Atlántico Norte, así como el presidente y los miembros del Comité Militar de la OTAN embarcarán a bordo de los buques, una vez hayan sido recibidos por la ministra de Defensa, Carme Chacón, que también se desplazará a Rota.

Aunque el protagonismo se centrará en el Eisenhower, uno de los buques de guerra más potentes de la flota estadounidense y una pequeña ciudad diseñada para funcionar en el mar. De hecho, cuenta con una dotación de 6.000 personas encargadas del funcionamiento diario de una embarcación que ayer se encontraba a 20 millas al oeste de la Base Naval y que debido a sus grandes dimensiones no puede atracar en el mismo. Aunque, el pasado viernes sí estuvo en sus inmediaciones.

Los que sí se encuentran en Rota, a la espera de las maniobras que se desarrollarán hoy, son las cinco fragatas que componen la SNMG-1: la española Blas de Lezo, la portuguesa Corte Real, la holandesa De Zeven Provinciën, la estadounidense USS Halyburton y la alemana Emden.

Un flota que mantiene una alta disponibilidad ya que suelen ser la primera fuerza que se despliega en operaciones calificadas de crisis como es el caso de la Allied Protector, diseñada para asegurar el paso de embarcaciones por aguas somalíes y para la que se ha contado con la colaboración de la Unión Europea, que también se encuentra en el lugar a través de la operación Atlanta, que actualmente se encuentra bajo el mando español que mantiene la fragata Numancia y el petrolero Marqués de la Ensenada.

Primera fase

La importancia de la misión contra la piratería se observa a través de sus números pues el 30% de las embarcaciones mercantiles cruzan por aguas somalíes. Por eso, uno de los primeros cometidos realizados por parte de la operación fue la de establecer un corredor en aguas internacionales entre el Golfo de Adén y la costa oeste de Somalia para que los barcos mercantes pudieran transitar de forma segura sin temor a los ataques de los piratas.

Según el contraalmirante José Pereira da Cunha, al mando de la SNMG-1, lo que más trabajo costó fue «adquirir información sobre las posibles amenazas que pudieran ocurrir y en función de eso organizar la intervención, algo que es fundamental». Tanto es así, que fue lo más complicado y en lo que más tiempo se tardó, pues una vez establecida la forma de actuación de los piratas, fue más sencillo establecer los protocolos de actuación.

Pereira da Cunha ha reseñado además la trascendencia de la coordinación y la cooperación, ya que ha asegurado que en la zona había en torno a unos 40 buques de guerra de diferentes países actuando contra la piratería.

Por su parte, el comandante Aurelio Matos, al mando de la fragata española Blas de Lezo, integrante de la SNMG-1, enfatizó además que «los piratas son enemigos difíciles porque conocen bien la zona». En este sentido, Pereira da Cunha indicó que localizar las pequeñas embarcaciones de los piratas puede ser difícil y para ello se utilizaron frecuentemente los helicópteros. Una vez localizados, «no se resisten, intentan huir pero cuando son alcanzados se rinden inmediatamente». Durante cinco meses las naves han estado desplegadas por Somalia hasta que el pasado 29 de junio fue relevada por la SNMG-2.