«Aquí nazco cada día»

El Hogar Gerasa se inauguró el 25 de octubre de 1996 y desde entonces su meta no ha sido otra que la de luchar por los enfermos de SIDA. Por sus paredes han pasado casi 700 pacientes de los cuales aproximadamente un 18% fallece, un 20% mantiene secuelas graves de la enfermedad, otro 20% sufre una patología dual y el resto son personas reinsertables en la sociedad. Uno de esos pacientes es José Bella Pérez, un gaditano que cayó en el mundo de las drogas y para quien existe una salida gracias a casas como el Hogar Gerasa. «Aquí tengo un nacimiento nuevo cada día y soy otra persona desde que ingresé en el centro hace ya cuatro años», explicaba José. «Si me vuelvo a caer en la vida probablemente no me vuelva a levantar y gracias a Gerasa puedo contarlo», añadía. Sus ojos hablan de un mundo interior que va más allá de lo corriente y en sus manos porta orgulloso el libro de poesía que logró publicar desde la casa de acogida.

Dardos en el aire es el título de una serie de poemas que muestran la visión de la vida y de los demás que este gaditano tiene a través de sus propias vivencias. Sus días en el centro se reducen a la lectura y la pintura, pues tiene 64 cuadros que algún día le gustaría exponer.