La Junta retoma la fusión de Unicaja y Cajasol como prioridad para esta legislatura

El foco retorna a la escena en la que las dos principales cajas de ahorros andaluzas inician su largo y complicado proceso de fusión. El Gobierno andaluz ha tardado 48 horas en volver a poner sobre el tapete la necesidad de que Unicaja y Cajasol establezcan, antes de que culmine la actual legislatura, una 'hoja de ruta' para iniciar el camino hacia la gestación de la 'gran caja' andaluza, que se situaría entre las cinco entidades más importantes de España.

Todas las partes reconocen que esta anexión no podrá culminarse antes de 2012, fecha en la que se celebrarán los próximos comicios autonómicos. Lo que persigue el Ejecutivo de Manuel Chaves es que en los tres próximos años se den «pasos decisivos» hacia ese objetivo, según indicó ayer Enrique Cervera, portavoz del Gobierno andaluz.

Los periodistas preguntaron a Cervera, tras el Consejo de Gobierno de ayer, el efecto que podría tener en esta negociación la ruptura entre Caja Castilla-La Mancha y Unicaja. El portavoz entiende que este hecho despeja el panorama para continuar con un proceso que, recordó, se encuentra en fase embrionaria. Dijo, eso sí, que la Junta respetará al máximo la independencia de estas dos entidades durante el proceso de convergencia.

A los responsables de Unicaja les hubiera costado mucho trabajo poder llevar, de forma paralela, los procesos de absorción de Caja Castilla-La Mancha (CCM) y la fusión con Cajasol, por lo tanto, a juicio del Gobierno andaluz, ahora se aclara la senda para el acuerdo entre las entidades con sede social en Málaga y Sevilla.

De igual manera, quiso dejar claro, tras lo ocurrido en relación con CCM, que el Ejecutivo andaluz «nunca va a actuar irresponsablemente en relación con las entidades financieras». Apuntó que los problemas que ha tenido dicha entidad son de distinta naturaleza, si bien uno de ellos tiene que ver con una «gestión irresponsable por parte de terceros» que ha provocado una fuga importante de capitales, lo que pone en riesgo a la entidad, en alusión al PP castellano-manchego.

Pretensiones

Tras señalar que desde el Gobierno andaluz, se respeta la opinión del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, respecto a que las «pretensiones excesivas» de Unicaja hicieron «inviable» la fusión con CCM, Cervera manifestó que la Junta de Andalucía tenía claro que no se podía producir una operación que pusiera en «peligro la solvencia» de una entidad financiera fuerte como Unicaja.

Recalcó que para el Ejecutivo autonómico era una condición 'sine qua non' que hubiera avales suficientes a la hora de abordar dicho proceso.

En este sentido, Europa Press adelantó ayer que la Junta y Unicaja exigieron al Banco de España un aval de 3.000 millones de euros a fondo perdido para abordar con garantías la fusión por absorción de Caja Castilla La Mancha, sin embargo, el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, sólo accedió a ofrecer 1.600 millones.

Inviable

Fuentes de la negociación indicaron que la operación no se pudo realizar ante la negativa del Banco de España a avalar los 3.000 millones de euros, una cifra que se acercaba al desfase patrimonial de CCM.

«Las negociaciones fueron duras», advirtieron estas mismas fuentes, que dejaron claro que la Junta de Andalucía se mantuvo «firme» en todo momento, ya que «lo primordial era garantizar la solvencia de las entidades».

De esta forma, a lo largo de la jornada del pasado viernes, las reuniones -en las que participó de forma activa el vicepresidente segundo de la Junta, José Antonio Griñán- fueron continuas en la sede del Banco de España, aunque sin éxito.

El fallido proceso de fusión entre Unicaja y Caja Castilla-La Mancha y la pretensión del Ejecutivo de Manuel Chaves de allanar el camino para la 'gran caja' andaluza genera noticias en clave económica y política.

Así, el secretario general del PP-A, Antonio Sanz, solicitó ayer a Manuel Chaves, que exija al líder del Ejecutivo de Castilla-La Mancha, José María Barreda, una rectificación por culpar «en exclusiva» a Unicaja de que no se produjese finalmente la fusión por absorción con la caja manchega.

Barreda aseguró ayer que las «pretensiones excesivas» de Unicaja hicieron «inviable» el proceso de fusión de ésta con CCM -entidad que ha sido intervenida por el Banco de España-. Sanz consideró que el presidente de la Junta de Andalucía no puede aceptar que se «agreda» a una caja andaluza de tal manera, por lo que, a su juicio, debe corregir al líder el Ejecutivo de Castilla-La Mancha.