FÚTBOL | PRIMERA DIVISIÓN

El Numancia se agarra a la salvación con su victoria frente al Sporting

Tras la derrota de Santander, el conjunto de Pacheta ha tomado oxígeno ante un rival que no había conseguido ganar en los seis últimos encuentros

SORIA Actualizado: Guardar
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El Numancia se agarra a la Liga tras su victoria agónica y muy sufrida frente al Sporting de Gijón, por 2-1, en un encuentro en el que el conjunto soriano defendió el resultado durante media hora con un jugador menos.

La expulsión de Moreno -rigurosa, por lo demás- en el primer cuarto de hora de la segunda parte, cambió los planteamientos y el partido. El conjunto soriano se echó atrás para defender su mínima ventaja, mientras el Sporting buscaba las alas y los centros al área para nivelar, cuando menos, el encuentro.

Fue un monólogo ofensivo del conjunto asturiano en la última media hora, pero sin claras ocasiones ante la bien plantada defensa numantina. Pacheta movió el banquillo para dar oxígeno a la medular y dejo a Brit y su velocidad como casi único recurso ofensivo.

Hasta la expulsión, el Numancia fue otro. De entrada, saltó al campo con cinco novedades en la alineación y más casta que su rival, buscando el juego aéreo de sus puntas, en caídas a las bandas. Así se forzaron dos penaltis en apenas cinco minutos, aunque el partido se fue equilibrando, a medida que el Sporting tapó las salidas de la defensa y medular numantinas.

El Numancia, sin complejos

El primer aviso claro fue protagonizado por Nagore, que cumplía hoy su partido número cien con el Numancia en Primera, al rematar de cabeza un saque de falta de Barkero. Pero el aviso se quedó en eso durante muchos minutos. El partido entró en una fase de equilibrio, con muchos jugadores en el centro del campo que complicaba el avance, en combinación, del contrario.

Pero en el último cuarto de hora, el Numancia volvió a intensificar su asedio. Aranda lo intentó de media vuelta, Nagore empalmó desde fuera del área y Goiria caía dentro del área reclamando pena máxima. Fue el anticipo de la jugada del penalti. Aranda fue agarrado por su marcador y la máxima pena -tras el retraso del árbitro en señalizarla y la consiguiente polémica-, fue materializada por Barkero.

Era justo premio a una mayor vocación numantina por conseguir engancharse a la permanencia con una victoria. Después, en la reanudación, llegó el rápido empate del conjunto asturiano y la remontada local. El asedio asturiano, finalmente, no fue suficiente ante una defensa, ciertamente, numantina.