El Barcelona ansía reconciliarse con el torneo del KO a costa del Mallorca
«Me gustaría que la gente tomase conciencia de que estamos a un paso de jugar una final de Copa que hace más de diez años que no disputamos». Las palabras de Pep Guardiola reflejan la concentración con el que su equipo afronta hoy en el Camp Nou el partido de ida de la semifinal de la Copa del Rey ante el Mallorca. El club azulgrana es el Rey de Copas gracias a sus 24 títulos, uno más que el Athletic, pero no conquista el trofeo desde la temporada 97/98, cuando derrotó en la final al club balear en los penaltis tras el 1-1 con que finalizó el encuentro.
Actualizado: GuardarLa Copa no es una competición menor para el Barça. Nunca lo ha sido. Existe una palabra tabú que nadie perteneciente al club quiere pronunciar en exceso por prudencia, pero que flota en el ambiente: triplete. Con 12 puntos de ventaja sobre el Madrid en la Liga y los octavos de final de la Champions League ante el Lyon a la vuelta de la esquina, esta ida de la semifinal de Copa llega en un buen momento. Guardiola quiere sentenciar en el Camp Nou porque el Mallorca está más centrado en la pelea por salvar la categoría que en una posible gesta copera y porque la vuelta, además, no se disputa hasta dentro de un mes (el 4 de marzo).
Casi se le escapó ayer al señalar que «será importante conseguir un resultado que permita centrarse en la Liga y la Champions». Incluso tuvo un desliz dentro de su respeto a todos los rivales, pero rectificó al segundo: «El equipo saldrá a hacer muchos goles ¿Borrad esa frase! Quiero decir que intentaremos ofrecer un buen partido ante un rival que nos lo pondrá difícil. Ya tenemos la experiencia del Espanyol en cuartos, todos sabemos lo que nos costó eliminarles y estaban en igual situación que el Mallorca».
Con la incógnita de Pinto o Valdés en la portería, en la defensa son seguros Alves, Piqué y Márquez. Puyol está lesionado, aunque quizás juegue ya ante el conjunto asturiano. En la izquierda podría continuar Sylvinho, que ha rendido bien la Copa. El resto puede ser un híbrido entre el equipo A y el B.
