Sonríe hasta de noche

Edificios públicos como el Ayuntamiento, Correos y Telégrafos o el Gran Teatro Falla; iglesias emblemáticas como las parroquias de San Antonio, Santa Cruz o San Lorenzo; verdaderas joyas arquitectónicas como el Casino Gaditano o el Centro Cultural Reina Sofía; o antiguas fortalezas con solera como el Castillo de Santa Catalina o las Puertas de Tierra.

La ciudad que sonríe también se ilumina por la noche. Los monumentos gaditanos nos muestran una sonrisa a lo largo del día y su mejor luz durante la noche. Todo, fruto del desarrollo de un alumbrado ornamental realizado por empresas especializadas y en algunos casos mediante convenios con la Fundación Endesa.

Una de las prioridades del PGOU estribaba en dotar a los edificios más emblemáticos de Cádiz de una ornamentación especial cuando cae la noche. Esta preocupación ya aparecía recogida en los programas pioneros del actual equipo de gobierno. Sin embargo, no fue hasta hace pocos años cuando se comenzó a desarrollar.

El criterio que se ha seguido abarca una gran cantidad de edificios, en su gran mayoría de titularidad pública y con muy diversas utilidades y engloba otros enclaves como el caso de la Plaza de San Antonio. Así, hasta más de una cincuentena.

Si hacemos un recorrido minucioso y pormenorizado concluimos que las iglesias son las que predominan en este itinerario iluminado. De esta forma, destaca sobremanera por su estética, impacto y señorío el de la Santa Iglesia Catedral.

Junto a la gran seo gaditana también llama la atención la inclusión de la iglesia de Santa Cruz (Catedral Vieja), la iglesia de San Antonio, la Iglesia Oratorio de San Felipe Neri (tan de moda en los últimos tiempos), la iglesia de San Lorenzo y las del Santo Ángel, La Pastora, La Palma, Capuchinos, San Agustín, La Merced, El Rosario, la Santa Cueva, San Juan de Dios, Santa María, San Pablo o El Carmen.

La zona de Extramuros tampoco ha sido ajena a este deseo de dotar a las fachadas de una luz especial y se ha sumado a la iniciativa con dos de sus iglesias más conocidas y emblemáticas, la de San Severiano y la de Santo Tomás.

Respecto a otro tipo de edificios que no tienen un carácter propiamente religioso sobresale el alumbrado especial del Ayuntamiento de la ciudad, así como el de Correos y Telégrafos (más brillante si cabe ahora con motivo de las fiestas navideñas), el Gran Teatro Falla -epicentro en poco más de un mes de los compases carnavalescos-, la Diputación Provincial, el Archivo Provincial o el Casino Gaditano (ahora propiedad del propio consistorio), son otros de los referentes destacados.

Cádiz ciudad, destacada y significada por plantar cara a los franceses hace ahora dos siglos, también se ha dignificado por la belleza de sus fortalezas que, de un modo especial, brillan igualmente por la noche. Es el caso de las Puertas de Tierra, de las Murallas de San Carlos, la Cárcel Real, los castillos de Santa Catalina y San Sebastián o el Monumento a las Cortes, que tanta repercusión está cobrando en la actualidad con motivo de la futura conmemoración del Bicentenario.

Y si los colegios también sonríen de día con la algarabía de la chiquillada, por la noche muestran una luz especial. Así ocurre con el de las Esclavas, el Niño Jesús, el Campo del Sur o la Salle Mirandilla.

El proyecto aún se encuentra pendiente de culminar futuras actuaciones. Así sucede con el Palacio del Congresos. En este caso, será la empresa Etralux la que hará cargo de las obras para mejorar la iluminación exterior de la antigua Fabrica de Tabacos, con un presupuesto de 65.000 euros.