Buscando sangre nueva

Manel Estiarte, Jesús Rollán y el resto de jugadores que conquistaron la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Barcelona y el oro en Atlanta también lograron entrar en los corazones de cientos de jóvenes españoles, que comenzaron a intentar emular sus éxitos.

En esta época nació el equipo gaditano de waterpolo gaditano (WUCA), pero el paso de los años ha dejado en el aire la continuidad de una plantilla con garantías de futuro. Los propios integrantes del club han decidido poner manos a la obra para evitar la falta de talentos gaditanos en uno de los deportes acuáticos más duros y técnicos. La primera medida en este sentido ha consistido en la puesta en marcha de una escuela de waterpolo a la que pueden apuntarse todos los jóvenes que lo deseen. «Hace dos años comenzamos con unos cursos de actividades acuáticas. No conseguimos sacar gente para hacer un equipo, pero tras el año pasado ya tenemos un equipo juvenil estable y ahora nos gustaría formar un conjunto cadete», explica el jugador Mario Bordonado.

El objetivo es formar jugadores que ocupen una de las trece plazas del equipo absoluto y para ello, esperan poder inscribir al equipo juvenil en la liga andaluza. «Es difícil tener recursos suficientes para mantener a los dos equipos, pero vamos a intentarlo. Sino, volverán a jugar en la liga provincial juvenil que ya creamos el año pasado. Todo el que quiera intentarlo sólo tiene que pasarse por el Pabellón Ciudad de Cádiz, donde estará toda la información a partir de mañana», concluye Bordonado.