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Los trabajadores de Sermasa y Pau se manifestarán hoy y mañana para reclamar el cobro de sus salarios

El secretario general de FSP-UGT, José Porras, explicó que los ánimos están "crispados" porque la situación está "exactamente igual que hace tres meses"

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Los trabajadores de Sermasa y Pau confirmaron que hoy y mañana celebrarán dos manifestaciones por las calles de La Línea si no se produce antes "una respuesta que posibilite el pago a la plantilla", a la que se le adeudan tres nóminas y una paga extraordinaria de verano.

El secretario general de FSP-UGT, José Porras, explicó que los ánimos están "crispados" porque la situación está "exactamente igual que hace tres meses" y recordó que los 110 empleados afectados permanecen desde el pasado día 18 acampados frente al Consistorio linense para reclamar una solución "inmediata" al conflicto.

Según dijo, el Ayuntamiento asegura que "va a secuestrar el servicio", considerando que "secuestrar el servicio sin pagar es pan para hoy y hambre para mañana". Por otra parte, recordó que la empresa -concesionaria del servicio de limpieza y conserjerías de los colegios públicos- "se niega a pagar" alegando que el Ayuntamiento le debe "600 millones de las antiguas pesetas".

En este sentido, Porras agregó que el Ayuntamiento "tampoco paga porque dice que Sermasa y Pau tiene el servicio" y, en definitiva, "se lanzan la pelota de un lado a otro y, mientras tanto, los trabajadores están sin comer".

Por otro lado, afirmó que "no les preocupa" que el Ayuntamiento haya anunciado su intención de emprender medidas judiciales contra los convocantes de la protesta por una "invasión" de la Casa Consistorial y sentenció que lo que "tendría que preocupar" al Ayuntamiento es "arreglar el problema de los trabajadores" porque la situación está "cada vez más enconada" y los afectados "al límite".

Finalmente, calificó de "vergonzosa" la actitud del Ayuntamiento que, por un lado, "echa la culpa a la empresa" y, por otro "no apoya lo suficiente a los afectados" que, según dijo, están durmiendo desde hace cuatro días a las puertas del Consistorio y "mantienen las puertas cerradas, negándoles el acceso siquiera al servicio".