Un taxista muere tras recibir varios impactos de bala en la localidad leonesa de Las Ventas de Albares

Un taxista de Ponferrada (León), José Miguel Alves Merayo, de 35 años, ha muerto tras recibir varios impactos de bala, posiblemente en un atraco, en la localidad leonesa de Las Ventas de Albares.

El suceso se produjo sobre las 4.00 horas de la madrugada. El cuerpo sin vida de fue hallado cuando un hombre, que viajaba con su coche por la N-VI, vio el taxi del fallecido empotrado contra un árbol en una zona de aparcamiento que se encuentra junto a la carretera, denominado camino de Las Llamas.

El vehículo, un Skoda Octavia, con matrícula 6851 CLZ y con licencia número 59, presentaba un pequeño impacto en la aleta delantera izquierda, producto del golpe con el árbol, y tenía las luces encendidas, pese a que la batería estaba casi agotada. Tendido en el suelo boca abajo, a poca distancia de la puerta del conductor, fue localizado el cuerpo sin vida del taxista , y junto a él un casquillo disparado con una pistola de bajo calibre, según las primeras investigaciones de la Guardia Civil.

Un último servicio en la estación de autobuses

La Guardia Civil ha señalado a los efectivos del 112 que asistieron a la zona para confirmar el fallecimiento del hombre que el taxista podría haber sufrido un atraco o una agresión.

El presidente de la Asociación de Taxistas de Ponferrada, Raúl Jato, ha expresado su consternación por la muerte de José Miguel Alves, a quien ha calificado como "un chaval muy majo, con un gran desparpajo y con unas ganas enormes de trabajar".

Jato ha detallado que la víctima se encontraba sobre las 22.30 horas de ayer en la Estación de Autobuses de Ponferrada cuando alguien llamó a la centralita solicitando un servicio y fue entonces cuando se dirigió a recoger al cliente. "Desde entonces no se volvió a saber nada. Desconocemos qué pudo ocurrir, no hay ninguna pista", ha declarado el máximo responsable de los taxistas de Ponferrada. Pese a que la investigación apunta a un posible atraco, Jato ha precisado que el fallecido fue hallado con dinero en efectivo.

José Miguel estaba soltero, vivía con sus padres en Ponferrada y llevaba cuatro meses trabajando en este sector, que cuenta en la localidad leonesa con sesenta y cinco licencias.

Paro en señal de duelo

Todos los profesionales del taxi de Ponferrada se han sumado a un paro de veinticuatro horas en señal de duelo por el asesinato del compañero, al tiempo de que permanecen concentrados ante las puertas del Cuartel de la Guardia Civil de la localidad, donde se inspecciona el turismo de José Miguel Alves para hallar pruebas que conduzcan a la identificación y detención del autor de los hechos.

Los taxistas ponferradinos tienen también organizar una marcha fúnebre con todos sus vehículos coincidiendo con los actos fúnebres.