Un joven de 19 años mata a su novia, de 18, en Salamanca

La víctima mortal número 37 por violencia de género en España durante 2008 era una persona que tenía toda vida por delante, una chica de tan sólo 18 años de edad. La juventud también es una de las características de su verdugo, V. M. G. P., de 19 años, que asestó varias puñaladas a su novia, cuyo cuerpo abandonó en un paraje situado junto al depósito de aguas de Villamayor de Armuña (Salamanca). La mujer, cuyo nombre responde a las iniciales M. S. C. H., murió a consecuencia de las graves heridas de arma blanca provocadas por su compañero sentimental, que fue detenido en el lugar del crimen después de avisar él mismo a la Policía.

«A las 5 y 20 minutos de la madrugada se recibió una llamada en el 091 de un varón que había matado a su compañera», declaró el subdelegado del Gobierno en Salamanca, Jesús Málaga, quien desveló que «el chico estaba en una situación confusa y ofreció unos datos bastante imprecisos para su localización, ya que se encontraba en un descampado». El subdelegado añadió que los jóvenes llevaban dos años de noviazgo, aunque reconoció que el desencadenante del crimen podría estar causado por un deseo de ruptura. Sin embargo, no había antecedentes de peleas, episodios violentos o denuncias por malos tratos.

Aturdido

Cuando los agentes policiales llegaron al lugar de los hechos descubrieron que en el interior del coche estaba el cuerpo sin vida de la mujer. En la misma zona fue inmediatamente detenido el presunto agresor, que se encontraba muy aturdido, aunque la Policía destacó la colaboración que mostró desde el inicio de su arresto para esclarecer las causas del homicidio.

El subdelegado del Gobierno en la provincia de Salamanca adelantó que el motivo del crimen podría estar relacionado con un «ataque de celos». Jesús Málaga también resaltó la juventud de la víctima y del agresor. «Se estaba diciendo que si la violencia de género era un problema fundamentalmente de personas mayores, y estamos viendo que es uno de los casos de edades más tempranas».

Más de cincuenta personas se concentraron en protesta por el asesinato en la Plaza de la Constitución, donde se escucharon mensajes de «tolerancia cero» contra la violencia machista. Josefa Mena Martín, senadora socialista, consideró que el problema estriba en que hay hombres que «consideran a la mujer de su propiedad».