Recuerdos de aula con solera

El vestíbulo del colegio San Felipe Neri fue el lugar del reencuentro de la promoción de bachilleres de 1958. Allí entre efusivos abrazos y presentaciones -ha pasado tanto tiempo que algunos ni se reconocían-, los ex alumnos volvieron a recordar viejos tiempos y batallitas en el aula. «Cómo has cambiado», «¿Recuerdas las bromas que le gastábamos al profesor de Religión?». Juan Antonio Copano Abad, médico y catedrático de la Universidad de Cádiz, reconocía que esta promoción había sido «muy buena» porque «de aquí han salido talentos que hoy dirigen empresas».

Ricardo Álvarez López (64 años) tiene entre manos un reto importante con su empresa, Dragados: «Construir el Metro de Sevilla». Juan Pérez Moreno es «el segundo de Florentino Pérez en ACS», según detalla Valentín Lasanta Gutiérrez, otro de los veteranos estudiantes de San Felipe Neri que junto con Enrique Pérez Benítez, ha hecho posible el encuentro y ha organizado la programación de actos de este fin de semana.

René Miguel Pagnon Jiménez (67 años) terminó los estudios de Física y se fue a vivir a Valencia para dedicarse a los Seguros. Ayer encontró su colegio «muy cambiado» después de tantos años. «Éste es el equipo de fútbol de la clase. Lo peor de todo esto es ver los que ya no están entre nosotros, eso desmoraliza», decía mientras enseñaba una fotografía en blanco y negro en el patio del centro.

Otros como Luis Díez de Oñate se fueron al campo, concretamente a Algeciras para dedicarse al oficio de Agricultor, su gran pasión.

Las primeras pillerías comenzaron en la celebración de la misa instantes después de la foto de familia en el altar. En las últimas filas Jaime Rocha Rodríguez y Rafael Morillo Crespo no paraban de reírse mientras el sacerdote Enrique Torres, destinado en el colegio Del Pilar de Madrid, celebraba la misa.

Durante el almuerzo en el restaurante Casanova se dio rienda suelta a las bromas en el momento de la entrega de orlas.

Hoy continúan las actividades. Los ex alumnos marianistas visitan Jerez donde comerán en el Museo Taurino. Mañana, un paseo por la Bahía de Cádiz en el catamarán servirá de despedida.