Lorenzo vuelve a impresionar y acaba en el podio, mientras Debón logra su primer triunfo

El italiano Valentino Rossi consiguió en Francia igualar al mítico Ángel Nieto, al alcanzar su victoria número 90, en una carrera cargada de sorpresas, en la que Jorge Lorenzo, con los tobillos rotos, volvió a impresionar, remontando desde la undécima a la segunda plaza. La prueba disputada en Le Mans contó también con la visita de la lluvia, aunque el agua no llegó a condicionar la carrera de MotoGP.

El primer líder de la prueba fue Casey Stoner, batallando con Dani Pedrosa ante la atenta mirada de Colin Edwards, que marchaba tras ellos. Valentino Rossi era inicialmente sexto, aunque al italiano sólo le hicieron falta un par de vueltas para meterse en el grupo de cabeza. En la octava vuelta Rossi se puso en delante y comenzó a poner tierra por medio frente a sus rivales, que seguían siendo Stoner, Pedrosa y Edwards, por este orden. Sin embargo, el español rebasaría posteriormente al australiano, aunque ambos padecieron problemas con sus respectivos neumáticos delanteros.

Para complicar aún más las cosas, a trece vueltas para el final, comenzó a llover nuevamente, provocando la indecisión en todos los boxes. Al final el agua no fue tan intensa como para entrar a cambiar de moto, algo que sólo hicieron los dos pilotos de Ducati por diversos motivos. Stoner, que disputaba su gran premio número 100, sufrió una avería en el motor y aprovechó la situación para regresar a duras penas hasta el box y volver a salir con su moto número dos, consiguiendo finalizar la carrera, pero fuera de la zona de puntos.

Con Nieto en la moto

Al mismo tiempo, Jorge Lorenzo remontó desde la undécima posición hasta llegar a la cabeza de carrera, y se colocaba segundo a pesar de la lluvia y sus problemas físicos. En esta ocasión, Lorenzo se tomó su tiempo y fue de menos a más, coronando su magistral actuación en los últimos giros. El mallorquín entró en meta a cinco segundos de su compañero y ocupa el segundo puesto en la general, empatado con Pedrosa, y a tres puntos de Rossi. El italiano consiguió su segunda victoria consecutiva y lo celebró con el propio Ángel Nieto subido en la moto para dar juntos la vuelta de honor a Le Mans. Además, el italiano festejaba su nueva condición de líder de la categoría. Colin Edwards completó el histórico podio copado por la marca del diapasón.

Debón, feliz

Álex Debón consiguió su primera victoria mundialista en Le Mans, a los 32 años, y tras haber superado la centena de grandes premios disputados, sin dejar de trabajar en ningún momento, aunque en los últimos años lo haya hecho desde la sombra. El piloto castellonense marcó la pole y dominó la prueba con autoridad desde el principio, a pesar de que la pista estaba mojada en los primeros compases de la carrera.

Debón se mostró igual de contundente conforme la pista se fue secando, hasta cruzar la meta con cerca de cinco segundos de ventaja. Tras él rodaron durante gran parte de la prueba Pasini y Simón, pero el español se desinfló en los últimos compases de la prueba al ser superado por el grupo que llegaba por detrás. La segunda plaza fue finalmente para Marco Simoncelli, poniendo la máxima emoción de la carrera en el último giro, al jugarse la segunda plaza frente a Pasini. Y el líder, Mika Kallio, fue quinto, manteniendo su condición en la general.

Lluvia en 125 cc.

En 125 cc. la carrera quedó reducida a una especie de anécdota de cinco vueltas, a causa de la lluvia. La prueba se tuvo que interrumpir antes de que se cumpliera el porcentaje de carrera reglamentario que hubiera dado por definitivo un primer puesto de Joan Olivé.

La interrupción llegó una vuelta antes de que eso pudiese hacerse realidad y con la nueva normativa no se suman los tiempos. Así las cosas, el francés Di Meglio consiguió con la Derbi su primer triunfo y le dio al público la alegría de ver ganar en casa a uno de los suyos, algo que no sucedía desde hacía 26 años.