ESPAÑA

La «exquisita neutralidad» de Aznar

Los dirigentes del equipo de Mariano Rajoy alaban la «exquisita neutralidad» del ex presidente José María Aznar, que se ha negado a intervenir en la crisis interna del PP a pesar de que está al tanto de todo lo que ocurre y en permanente contacto con numerosos políticos populares. En recíproca consideración, el actual líder del partido no quiso pronunciarse sobre la actitud de su predecesor cuando fue preguntado ayer por los periodistas durante la recepción con motivo del dos de mayo en la Comunidad de Madrid.

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«No puedo opinar de lo que desconozco», alegó Rajoy y no mentía, porque el presidente del PP no habla con su mentor. Tampoco José María Aznar ha vuelto a ponerse en contacto con el líder de la oposición después de la noche electoral.

Quienes sí se mantienen en contacto con el presidente de honor son los políticos que formaron parte de su equipo y, últimamente, muchos diputados. El ex presidente del Gobierno recibe a todos los que solicitan una entrevista con él. A sus demandas, quejas e inquietudes, Aznar responde a todos con la misma receta: «Habla con Rajoy, haz lo que él te diga y no te metas en líos».

Una «pipiola»

Su inhibición es sólo similar a la que también mantiene Rodrigo Rato cuando quienes fueron sus colaboradores se dirigen a él para pedirle que intervenga antes de que el PP entre en una deriva irrecuperable. Rato, en sus actividades profesionales privadas y Aznar, en permanentes viajes a América, se mantienen al margen de los avatares de su partido. Ambos tienen previsto asistir al congreso de Valencia.

En plena bronca con Rajoy, Esperanza Aguirre logró coincidir con Aznar en el mismo vuelo a Argentina donde ambos participaron en unas jornadas organizadas por la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales. Tampoco ella consiguió arrancarle de su mutismo y así lo confesó ayer ante los periodistas. «Aznar me debe considerar una pipiola porque no me ha llamado», ironizó.