Cantera arcense en la que se ha superado la capa freática. / L. V..
Ciudadanos

Ecologistas y Ayuntamiento crearán una comisión de estudio sobre las canteras

Gobierno municipal y conservacionistas abordan, en una reunión, cuestiones como la instalación de eólicas, las obras del Guadalete o la medición de niveles contaminantes

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Miembros de Ecologistas en Acción (EA) y del equipo de Gobierno arcense, los delegados de Urbanismo, Joaquín Macías, y el Medio Ambiente, Antonio Ruiz, han mantenido una reunión, a la que se incorporó más tarde la alcaldesa, Josefa Caro (PSOE), con el fin de debatir sobre la política urbanística y medioambiental en el municipio. Entre las cuestiones se habló de la proliferación de canteras y la necesidad de una moratoria al respecto. El equipo de Gobierno se comprometió a crear con los ecologistas una comisión de estudio y seguimiento de las canteras, con el fin de evitar nuevas iniciativas.

En lo referente al Carril de los Aceiteros, cuyo camino alternativo ha sido interrumpido ilegalmente por un particular y por el campo de golf, ante la denuncia de EA, el equipo de Gobierno se comprometió a ordenar el derribo urgente de las vallas y cancelas que impiden el paso y también mostró su deseo de señalizar el carril alternativo diseñado. Al mismo tiempo, se organizará una visita a dicho campo de golf para que se informe a la organización conservacionista acerca del riego de la instalación.

Por otra parte, los ecologistas pidieron que se actúe en el tema de las construcciones ilegales, ante lo que recibieron la respuesta de que los promotores serán sancionados pero que «el Ayuntamiento no dispone de recursos suficientes para la vigilancia para evitar la continuación de la obra, por lo que solicitarán la ayuda de otras administraciones», aseguran desde la organización conservacionista. También se le pidió a la Alcaldesa que se instalaran en el Paseo de Andalucía rótulos digitales indicadores de la contaminación, con el fin de que todos los arcenses conozcan los impactos producidos por la térmica, las ladrilleras y los vehículos.

Se trataron otros asuntos de importancia medioambiental, como la instalación de parques eólicos. Los ecologistas y equipo de Gobierno coinciden en su construcción, siempre que no exista impacto visual, ya que hay que apostar por las energías renovables y limpias, que hacen disminuir los GEI (Gases Efecto Invernadero).

Por último, EA volvió a reiterar su apoyo al proyecto de adecuación e integración ambiental del entorno del río Guadalete a su paso por Arcos, siempre que se controlen los vertidos sin depurar, exista una limpieza cuidadosa de sus márgenes y de zonas puntuales de su cauce y no se dañe la flora y la fauna existente. Al tiempo que se mostraron contrarios a la instalación de un kiosco-bar en el Lago de Arcos, al considerar que las concesiones de la Agencia Andaluza del Agua y el PGOU de Arcos lo impiden, además de ocasionar impacto paisajístico, debiendo dedicarse el espacio a actividades sociales y recreativas. Según el equipo de Gobierno, el proyecto no pretende incumplir la ley, ni impactar en el entorno. Sin embargo, les transmitió su negativa a la instalación de otros negocios cercanos al río Guadalete, por ir en contra de la normativa urbanística, medioambiental y del patrimonio cultural arcense.

Herbicidas

Por otra parte, Ecologistas en Acción ha denunciado que la Consejería de Obras Públicas de la Junta de Andalucía, con autorización de la de Medio Ambiente, ha procedido a envenenar con herbicidas las cunetas de las carreteras del Parque Natural Sierra de Grazalema. En los últimos años, la organización conservacionista ha venido mostrando su oposición a estos tratamientos con herbicidas, más aún cuando afectan a espacios protegidos.

EA asegura que la justificación para estas fumigaciones es eliminar hierba para favorecer la visibilidad de las carreteras y reducir los riesgos de incendio, «argumentos tan inútiles como falsos», apuntan, pues «se han fumigado de forma indiscriminada tanto curvas como rectas, y el secar la hierba no reduce el peligro de incendios, sencillamente lo adelanta». Al mismo tiempo entienden que las consecuencias suelen ser «nefastas», pues no sólo se consigue secar la hierba, sino que se afecta a los numerosos pies de árboles y arbustos que existen en los márgenes, dejando un producto tóxico esparcido por la zona.

sierra@lavozdigital.es