Una amiga de Amy dice que un hombre le invitó varias veces a subir a su coche

La desaparición de la joven de Mijas Costa Amy Fitzpatrick, de 15 años, sigue siendo un misterio. La última pista la ha aportado una amiga de la menor, Ashley Rubio una de las últimas personas que la vieron el pasado 1 de enero, antes de que la familia denunciara la desaparición. La joven, bastante afectada por el suceso, no cree que Amy pensara en fugarse de casa porque no llevaba dinero ni teléfono móvil. Ayer aseguró que no le había comentado nada en este sentido pero sí le había dicho en repetidas ocasiones que de camino a su casa, ubicada en la urbanización Riviera del Sol, alguien le había invitado a subir a un coche.

Rubio confirmó la versión ofrecida por la familia de la joven de origen irlandés y dijo que se marchó de su casa ubicada en la urbanización cercana Calypso a las diez de la noche después de que ambas cuidaran de su hermano pequeño. Desde ese momento no ha vuelto a saber de ella.

El camino que supuestamente tomó Amy para dirigirse a su casa es un atajo a través de la vegetación donde hay una zona en construcción que carece de iluminación nocturna. La joven solía ir por ese sendero porque «es más rápido», según su amiga. «Yo creo que le ha pasado algo malo», señaló.

La madre de Ashley, Deborah Rose, ha corroborado la versión de su hija y ha explicado que salió en Nochevieja y volvió a casa sobre las 03:00 horas del día 1, que conversaron unas horas y las tres se fueron a la cama. Por la mañana, su hija y Amy estuvieron en Fuengirola porque creían que habían empezado las rebajas, después volvieron a casa para almorzar, por la tarde fueron a la zona del zoco de Calahonda, y regresaron sobre las 21:45 horas. Unos quince minutos más tarde Amy Fitzpatrick recogió sus objetos y se marchó. En ese momento llevaba puesto un pantalón y unas botas de su amiga, y portaba una bolsa de color rojo, según Rose.

La Guardia Civil ampliará mañana a la Sierra de Mijas el dispositivo de búsqueda para encontrar a Amy con la participación de voluntarios y efectivos del 112, que partirá a las nueve de la mañana del campo de fútbol de La Cala de Mijas. La búsqueda comenzó el pasado día 3, momento en el que la madre denunció la desaparición de la niña. Desde entonces un amplio dispositivo de la Guardia Civil, la Policía Local y Protección Civil con un helicóptero dotado de sensor térmico y perros de rastreo han realizado batidas en la parte alta de la urbanización Riviera del Sol después de peinar los primeros días el paraje comprendido entre esta zona y Calypso. Los agentes se han adentrado en varias ocasiones en el monte para buscar entre la maleza algún rastro que pudiera conducir hasta la joven desaparecida. Un terreno escarpado y solitario donde apenas hay algunas viviendas en construcción cercanas a la autopista.