«Los jóvenes tienen cada vez menos interés en aprender»

Ante esto, docentes de Lengua Castellana y Literatura como Carlos Sánchez, con una experiencia en las aulas de 17 años y que actualmente da clases a alumnos de 2º de ESO a 1º de BUP, se defienden y piden la colaboración de las familias en la responsabilidad de crear un hábito de lectura que favorezca el estudio de los jóvenes estudiantes. «Está claro que en este tema hay una responsabilidad compartida de padres y profesores. Los jóvenes tienen cada vez menos interés en aprender y ante esta situación los colegios e institutos tienen poco que hacer», dice Sánchez.

Los problemas se arrastran desde las primeras etapas educativas y eso desemboca en situaciones preocupantes. «Sólo un 20% de mis alumnos de Secundaria muestran un nivel aceptable de lectura, cuando hace una década sólo un tercio de cada clase tenía problemas de comprensión lectora. Además, se da la circunstancia de que la mayoría de los alumnos que leen son chicas», explica este profesor de Lengua.

El aumento de recursos y la modernización de los métodos de enseñanza sólo significarían para Sánchez un solución parcial. «Es cierto que haría falta un bibliotecario en cada centro que desarrolle actividades de animación lectora, pero se ha invertido y se han cambiado muchas cosas en la enseñanza que no lucen porque los niños no tienen hábitos en sus casas. Para nosotros que un adolescente lea un libro es una lucha. Prefieren buscar un resumen en internet, en la página como la de El Rincón del Vago, a leerse el libro. Por eso, la familia es la primera obligada en crear un hábito de estudio», sentencia Sánchez.