ÓRDENES. Schuster, en el partido ante el Mallorca. / AP PHOTO
PRIMERA DIVISIÓN

El Madrid de Bernd Schuster, el mejor de la historia en puntuación

El actual líder de la Liga camina hacia el récord goleador de toda su historia Haber convertido el Bernabéu en un fortín y la pegada, sus grandes avales

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El Real Madrid, avalado por el fortín del Bernabéu, donde no conoce la derrota desde hace 279 días, y su pegada (29 goles), ha firmado ya el mejor arranque de su historia en puntuación. Aunque los tres puntos por victoria se conceden desde hace poco más de una década, en la temporada 1995-96, nunca hasta ahora el equipo blanco había sumado tantos puntos en 12 jornadas de Liga. De los 36 en juego, el equipo de Bernd Schuster ha conseguido 28, para convertirse en líder en solitario y reforzar su favoritismo, cuando la pasada temporada, en la que se aseguró el título gracias a su espectacular racha en la recta final y a los regalos del Barça, había logrado 26 y ocupaba la tercera plaza.

También es el mejor inicio del Real Madrid en número de victorias desde la campaña 92-93. Hasta el momento lleva nueve triunfos, un empate y dos derrotas, además de ser el equipo más goleador de la competición y el tercero menos goleado, con 12 tantos en contra, sólo superado en este terreno por el Racing (9 encajados) y el Barcelona (10). Con números de récord, el equipo blanco camina hacia la plusmarca goleadora que estableció el Madrid de Toshack en la temporada 89-90 (107 dianas), con Schuster de cerebro en el medio campo y Hugo Sánchez de matador en el área.

Entonces, en las doce primeras jornadas, aquel Madrid de la Quinta del Buitre que reinaba en España y en Europa tenía como verdugo al Milan, había conseguido sólo tres goles más que ahora. El técnico alemán, después de muchas rotaciones y ensayos de sistema en un dubitativo comienzo de Liga, en el que no existían las bandas, parece haber encontrado ya su modelo ideal, con una pareja de pivotes formada por Diarra y Gago, Guti por delante con plena libertad (frente al Mallorca fue Sneijder, aunque fracasó como organizador) y Robinho en estado de gracia tirado a la izquierda. Con ese sistema, su dúo de delanteros (Raúl y Van Nistelrooy) suma hasta el momento 12 goles, con el capitán blanco como segundo mejor artillero nacional, empatado con Morientes y Tamudo y sólo superado por Güiza.

El Real Madrid de Capello, el que se dejaba dominar por rivales inferiores, se dedicaba a la contención, despreciaba el balón y sobrevivía gracias a las paradas de Casillas y los goles de Van Nistelrooy, llevaba a estas alturas de Liga una media de sólo 1,8 tantos por partido. El de Schuster, aunque aún muy lejos de la «excelencia» deseada por su presidente, del fútbol atractivo y la solidez defensiva que pretende el técnico alemán, sí puede presumir de grandes números que le mantienen al frente de la tabla, y de hacer disfrutar -aunque también sufrir- a su afición por su contundencia en ataque.

Invicto desde la pañolada

El Madrid siempre ha marcado al menos dos goles en cada partido de Liga que ha disputado en el Bernabéu, donde con Capello y Schuster ya acumula trece victorias consecutivas. El Madrid no pierde en su estadio desde hace nueve meses, cuando el 4 de febrero la derrota ante el Levante provocó una tremenda pañolada de una afición harta y gritos de dimisión hacia Calderón y el técnico italiano. Sin embargo, hasta la histórica goleada conseguida en Mestalla por el mejor Real Madrid de la presente temporada ante un Valencia roto (1-5), el fútbol del equipo blanco había sido muy pobre, pésimo en muchos casos, y sólo había destacado en las dos primeras jornadas, frente al Atlético (2-1) y el Villarreal en El Madrigal (0-5).

El Madrid aliado con la suerte, beneficiado por algunos errores arbitrales y con un fútbol entre discreto e insufrible, se mantenía hasta que se presentó en Mestalla en el alambre. Desde entonces, con el paréntesis de un Sevilla que fue superior y sentenció en sólo dos minutos, ha mejorado su nivel de juego y el Bernabéu se ha divertido con el fútbol de ataque de los madridistas. Así ha ocurrido en los dos últimos partidos, ante el Olympiacos en la Champions, aunque ahí le faltó su habitual efectividad, y frente a un espléndido Mallorca, destrozado por el gran momento de forma de Robinho, la calidad del equipo y el carácter ganador de los de Schuster, que no han perdido la confianza ni la garra que caracterizó al Madrid de Capello en una heroica fase final de campeonato.