Una mujer contempla el escaparate de una tienda de zapatos en la calle Compañía. / MIGUEL GÓMEZ
CÁDIZ

Los comercios piden información de los cruceros para poder abrir a mediodía

El Ayuntamiento asegura que tiene previsto reunirse con los empresarios Los comerciantes sugieren que no sólo se les digan los horarios de visita de los turistas, sino que se informe a los visitantes de qué tiendas están abiertas

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Comerciantes del casco histórico quieren que la Delegación de Turismo les dé oportuna información de los cruceros que llegan a la ciudad y que al mismo tiempo, si es posible, también proporcione a los turistas datos de los comercios que abren al mediodía. Se trata de aprovechar esas compras fugaces, ya que a menudo los viajeros de crucero se encuentran las puertas de los establecimientos cerradas entre las 14.00 y las 17.00 ó 18.00 horas.

Hay que tener en cuenta en primer lugar que las costumbres horarias de la mayor parte de los extranjeros son diferentes a las de los españoles. La hora de almuerzo en Europa, Norteamérica y muchos otros países es entre 12.00 y 13.00, con lo cual es después de comer cuando salen a comprar.

Además, hay que contar con el horario de partida de los barcos. A menudo, los turistas tienen que estar de vuelta a primera hora de la tarde, por lo que quieren aprovechar ese rato después del almuerzo para llevarse sus recuerdos.

El concejal de Comercio, Juan Antonio Guerrero, asegura que ha tratado este asunto en numerosas ocasiones con las asociaciones de comerciantes y les ha manifestado que quien lo desee puede abrir sus puertas a mediodía, que no hay impedimento con la normativa vigente en la mano. Sin embargo, los pequeños y medianos empresarios van más allá y aseguran que necesitarían la información de cuándo llegan estos cruceros y cuándo se van para poder hacer su planificación y sus propios horarios. Pero, además, como sugiere Carlos Díez, gerente de Pestana, lo ideal sería que estos visitantes pudieran saber qué comercios están abiertos para hacer sus compras. Díez sugiere, por ejemplo, que se pase un mapa o listado a los que estuvieran interesados en las oficinas de turismo.

El equipo de Gobierno asegura que tiene previsto reunirse con comerciantes para tratar este asunto y ver cuál es la mejor manera de afrontar esta política de apertura de establecimientos.

Aunque no todos están dispuestos a sacrificar las horas del almuerzo por un mayor rendimiento. «Nosotros dejamos abierto hasta un poco más tarde cuando sabemos que hay barcos en el muelle, porque los hemos visto y estamos hasta las dos y media o tres», señala Emilio Alcaraz, de la tienda de recuerdos Solves, situada en El Palillero. En este comercio regentado por una familia se venden recuerdos de todo tipo, carteras, abanicos y pequeños regalos, que son los preferidos por los extranjeros. Aunque no son los únicos. «Este año hemos tenido mucho turismo nacional, sobre todo del norte: cántabros, gallegos y vascos», explica Alcaraz. La diferencia entre el turismo nacional e internacional es obvia: los primeros conocen esta costumbre ibérica de los cierres de dos y tres horas a mediodía por descanso. Y es que para muchos, este horario es sagrado: «Hay que trabajar para vivir; no vivir para trabajar», afirma convencido Emilio Alcaraz.

Lo que pocos se plantean, desde luego, es uniformar los horarios de las tiendas que venden a turistas y abrir siempre a mediodía, todo el año, como se hace en muchos puntos de la costa levantina. «Nosotros nos lo estamos planteando, pero sobre todo de cara al verano», explica Belén Núñez, de Calzados Mayte, una de las tiendas más visitadas por la tradicional fascinación de los foráneos por los zapatos hechos en España.

Núñez confirma también que antes se pasaba una lista con la llegada de los barcos, pero que esto se dejó de hacer. «Sería interesante que nos pasaran esa relación», señala Jorge Oliva, gerente de El Potro, que apunta que la mayor afluencia de extranjeros comienza a las 12.00 y sigue hasta las dos de la tarde, hora en que este comercio echa la baraja.

Hay quien ha decidido ya que este volumen de negocio no puede desaprovecharse y abre todas las horas de la comida para atender a los viajeros de los cruceros cuando éstos llegan a la ciudad. Es el caso de la tienda Pecados, especializada en recuerdos, camisetas y regalos a precios asequibles: «Nosotros vemos cuándo llegan los barcos en la página de internet, aunque ahí no nos dicen si se quedarán o son de los que les montan en un autobús y les llevan a Jerez o Sevilla», comenta Paula Camacho, la dependienta. Por ello, también agradecerían una comunicación más específica, por parte de Turismo, con horarios y si tendrán o no excursión por Cádiz. Esta trabajadora confirma también que los extranjeros, cuando llegan a su tienda, se alegran de encontrar por fin algo abierto. «Les llama la atención que todo esté cerrado», asegura.

mcaballero@lavozdigital.es