«Spiriman», el declive de un líder
De convocar multitudinarias concentraciones para exigir una sanidad pública de calidad ha pasado a ser el propulsor de una agresiva campaña de insultos a través de sus redes sociales
Fue el médico que puso en pie a miles de andaluces para pedir una sanidad pública de calidad . El doctor Jesús Candel, alias «Spiriman», se mostraba ante la opinión pública como un líder capaz de movilizar a cientos de personas en multitudinarias concentraciones en Granada, Huelva, Córdoba, Málaga y Sevilla.
Unas movilizaciones que lograron no sólo paralizar la fusión de hospitales , uno de los ejes principales del modelo sanitario desarrollado por la Consejería de Salud desde tiempos de María Jesús Montero, la actual ministra de Hacienda, sino que también acabaron con las dimisiones del viceconsejero Martín Blanco y del gerente del SAS José Manuel Aranda y finalmente con el relevo del consejero Aquilino Alonso.
El éxito de estas movilizaciones de las plataformas sanitarias, que nacieron al hilo de la histórica manifestación convocada por «Spiriman» en Granada, terminó por generar una crisis que puso en jaque la gestión de la presidenta Susana Díaz y que dañó la imagen de la Junta de Andalucía hasta el punto que el Gobierno autonómico tuvo que dar marcha atrás en la fusión hospitalaria.
Cada manifestación que hacía, no dejaba indiferente a nadie. P asó a ser el azote del Gobierno de Susana Díaz y el promotor de la marea blanca andaluza . Sin embargo, en los últimos tiempos, el doctor Jesús Candel inició una agresiva campaña a través de las redes sociales en las que no se cansaba de proferir insultos a políticos, funcionarios, periodistas y hasta la propia la propia presidenta de la Junta
A sus espaldas cuenta con la inhabilitación por parte del Colegio de Médicos de Granada por reiterados insultos a personal sanitario a través de las redes sociales. Así, el pasado marzo se hacía pública la suspensión de 30 días de «Spiriman» como facultativo, una resolución que se producía a raíz de una denuncia de varios compañeros de profesión, que acabó con la sanción por una falta grave.
Ahora la Fiscalía de Granada ha iniciado un procedimiento penal contra este médico para valorar con todas las garantías jurídicas la posible comisión de delitos de injurias y calumnias contra distintas autoridades y funcionarios públicos, después de que se presentara una denuncia acompañada por más de 2.500 firmas en las que se ponía en conocimiento las descalificaciones que difundía Spiriman a través de sus redes sociales.
Ni siquera el aviso de la Fiscalía ha hecho que «Spiriman» cese en sus insultos. En su perfil de Twitter seguía ayer con su campaña de insultos difundiendo tuits con graves descalificaciones hacia la presidenta Díaz a la que se refirió en varias ocasiones como «hija de la gra p...».
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