Graves disturbios en el centro de menores de Jaén

El centro de protección de menores Carmen de Michelena de Jaén ha sido escenario esta madrugada de graves disturbios . Fuentes consultadas por este periódico aluden a la inhalación de disolvente por parte de menores está detrás del brote de violencia, que ha sido atajado por la Policía Nacional, cuyos agentes se han desplazado hasta el edificio hasta en 3 ocasiones.

La impunidad con que campan determinados adolescentes inmigrantes por el centro, gestionado por la Junta de Andalucía, ha quedado clara en el modo en el que uno de ellos, el más significado, se ha enfrentado a los monitores, a los vigilantes e incluso a los propios agente s , que finalmente le han detenido, aunque dada su minoría de edad penal sólo ha pasado una noche en el calabozo.

Las fuentes resaltan el importante papel que juegan la drogas en el centro, a pesar de que está prohibido su consumo. Aseguran que casi diariamente se requisan sustancias estupefacientes a algunos de los menores, los más díscolos, que tienen una influencia negativa sobre el resto. Así, en los recientes disturbios, aunque la mayoría de los adolescentes ha tenido en principio una actitud prudente, han sido espoleados por dos de los internos.

La violencia, apuntan, se deriva de la inhalación de disolvente, que les hace «perder los papeles». Es lo que ha ocurrido esta madrugada al requisarle el personal educativo el producto tras registrar sus habitaciones junto al vigilante jurado. Entonces tuvo lugar la primera llamada a la Policía Nacional, cuya presencia apaciguó los ánimos, si bien por poco tiempo, dado que al inhalar, al parecer, más disolvente volvieron a intentar enardecer al resto de chicos , lo que motivó el retorno de los agentes.

Cuando se fueron de nuevo, los chicos más conflictivos «se pusieron chulos». «Decían que les daba igual que llamaran a la policía. Están acostumbrados a hacer barbaridades que no tienen consecuencias ». Esta vez, sin embargo, la Policía ha detenido al principal instigador de los disturbios, que ha pernoctado en la comisaría antes de retornar al lugar, en el que reside junto a cerca de 30 menores, cifra que excede la capacidad del centro.

La problemática situación preocupa especialmente a los vecinos del casco histórico de Jaén, que han expresado en reiteradas ocasiones su malestar por la ubicación del centro de reforma de menores. Aunque la presencia de la policía local es casi permanente, aseguran que se ha incrementado la delincuencia, que achacan directamente a algunos de los menores. De hecho, la Policía Nacional ha retenido recientemente a 4 adolescentes internos como presuntos autores de 3 robos, uno de ellos con violencia.