«La financiación de las universidades no reconoce el esfuerzo investigador»

Pilar Aranda denunció que la deuda de la Junta de Andalucía puso al borde del colapso a la Universidad de Granada (UGR). Tras el pago de unos 38 millones de euros ingresados in extremis antes de final de año, se salvó parte del problema pero quedarían más de 110 millones pendientes, y el Gobierno de Susana Díaz no da plazos.

 Fue secretaria ejecutiva del Plan Andaluz de Investigación, y exige una década después un modelo de financiación que premie la calidad investigadora en las universidades andaluzas. Es la primera rectora de la UGR en sus casi 5 siglos de historia.

 -¿En qué nota un alumno que en el Rectorado haya una mujer al frente con un equipo de mujeres?

-En el pragmatismo y el realismo, con una dosis de vida universitaria del día a día que tratamos que se desarrolle lo más normal posible, con un punto de optimismo incluso en situaciones duras.

-Es el primer año que ha empezado como rectora, ¿qué le ha pedido a 2016?

-  Continuar con la fuerza e ilusión con el que creo que he arrancado este rectorado.

 -  La UGR ha estado en la lista de grandes morosos de Montoro.

-  Pero eso no tendría que haber sido así porque nosotros teníamos un certificado hasta septiembre de estar al día en nuestras deudas fiscales. Ellos mismos en la primera página de esa resolución indicaban que a lo mejor había errores y que algunos estaban al día.

 -   Ustedes pagaron en diciembre los 5,8 millones de euros que debían a Hacienda y otros atrasos que es por lo que salieron en esa lista.

-  Efectivamente, porque estábamos por encima de una deuda de 1 millón. Pero nuestra certificación estaba adecuada hasta septiembre. De hecho, hemos recibido subvención al final del año de investigación, de estancias breves, por estar al día. De lo contrario, no podríamos haber salido en la resolución que ha hecho la Secretaría de Estado de Investigación.

 -  Yendo al fondo del asunto, ¿el Consejo Social de la UGR ha enviado ya la carta a la Consejería de Economía pidiendo nuevos criterios de financiación para las universidades andaluzas?

-  No, se está preparando.

 - ¿En qué ganaría la Universidad de Granada con unos criterios más cualitativos en la financiación de la Junta de Andalucía?

-  Nuestra cuota de participación sería mayor. Yo reclamo un incremento de la financiación para las universidades públicas.

-  ¿Este modelo de financiación ahoga a las universidades andaluzas?

-  El modelo de financiación es el modelo de todos. No es el que impone la Junta, se ha negociado con las universidades hace tiempo. Se hizo en 2007, y a algunas universidades nos está impidiendo un desarrollo total, y otras (están) mejor.

 -  Hay universidades que tienen dinero ahorrado en el banco, ¿por qué la UGR está saliendo perjudicada?

-  En principio porque tenemos una parte de gasto estructural muy alto. Nuestra plantilla es muy cualificada y, permítame la expresión, más cara. Tenemos más catedráticos que otras universidades. Nuestra propia idiosincrasia de edificios, antiguos y modernos, ha llevado a que abrir la puerta de la Universidad de Granada para que comience el curso sean 6 millones de euros. La facultad de Medicina, en el Parque Tecnológico de la Salud, se ha construido con fondos propios, cuando estamos esperando, de ahí la deuda de la Junta de Andalucía, la inversión que hizo el Banco Europeo de Inversiones.

 -  El desencanto que hay ahora en los departamentos, ¿está basado en la sensación de que la Junta tendría que haber hecho discriminación positiva con la Universidad de Granada?

-  El desencanto que hay en los departamentos quiero quitarlo porque a la gente lo que hay es que explicarle la realidad.

 -  ¿No se han echado en falta medidas que paliaran ese agravio?

 -  Creo que no. Aquí se ha gestionado muy bien en tiempos muy duros, en esta Universidad no se ha despedido a nadie, y el Plan Propio de Investigación ha permitido alguna pequeña alegría. Pero es cierto de que todos hemos sentido que tenemos un modelo de financiación que no reconoce el esfuerzo de investigación que estamos haciendo. Una Universidad tan investigadora, con grupos de tanta excelencia, necesita un apoyo extra.