Cabalcor
Concurso de Atalaje de Córdoba | La «maravilla» de los carruajes clásicos vuelve a las calles y a Caballerizas
La prueba regresa tras el obligado parón de 2020 y sus bellos vehículos son admirados por cordobeses y turistas
La ciudad de Córdoba da hoy, 18 de septiembre, un nuevo paso en la carrera hacia la normalidad , cuya meta es dejar atrás el Covid. Y lo hace con elegancia . Porque, en el marco de la feria ecuestre Cabalcor, está teniendo lugar el VI Concurso Internacional de Atalaje de Tradición 'Ciudad de Córdoba' , organizado por el Club de Carruajes de Tradición de Córdoba, que el año pasado se tuvo que quedar en boxes por la pandemia.
La belleza y plasticidad de los coches de caballos participantes se ha exhibido por la capital, ya que los 21 participantes -«Son de altísimo nivel», se ha destacado desde la organización- han partido de forma espaciada a las 11.00 horas del Club Hípico de Córdoba y han atravesado República Argentina, Vallellano, el puente de San Rafael, la avenida de Cádiz, recinto ferial, o el Puente del Arenal para acabar llegando a Caballerizas Reales.
A su paso han despertado las miradas de atención de los cordobeses y los turistas . Y no extraña, porque, como recuerda, Carlos Sendino, gerente del Club de Carruajes de Tradición de Córdoba, el atalaje es «un coche de tradición , de época , que tiene una antigüedad». «De hecho, se puntúa si es un carruaje de antes de 1945 o posterior. El atalaje es también la vestimenta, es todo el conjunto del coche y los cocheros», explica.
El gerente del Club de Carruajes de Tradición destaca que en Córdoba «hay mucha afición» al atalaje y que ésta va en aumento
De las tres «principales citas» que hay en España de atalaje (Córdoba, Ronda y Sevilla), explica el gerente del Club de Carruajes de Tradición, la de la capital es la primera en volver a celebrarse , tras el estallido del Covid que obligó a cancelarlas en 2020. Sendino destaca que en Córdoba «hay mucha afición» a esta modalidad ecuestre y advierte de que cada vez va a más . «Tenemos cocheros de mucha categoría , que participan en los eventos de Sevilla, Ronda y Córdoba», argumenta.
Para este colectivo, la presente es una edición especial tras la suspensión forzosa de 2020 . Sendino indica que esta competición es una contribución a la vuelta a la «normalidad , viendo que los eventos con protocolo y seguridad se pueden desarrollar». El regreso del Concurso Internacional, sigue, es una «alegría» y quieren que esta competición ayuede también al «impulso turístico y económico».
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No en vano, explica, además de los participantes cordobeses, también hay concursantes procedentes de Mijas (Málaga), Cartagena (Murcia), Jerez de la Frontera (Cádiz); Madrid ; Sevilla y Portugal .
Uno de los participantes llegados de la nación lusa es Paulo Rosa , que participa con un carruaje anterior a 1945. Es su tercera presencia en el concurso cordobés . Asegura que acude a esta cita, entre otros motivos , porque es «una competición de muy buen nivel y en la que somos muy bienvenidos». «Es un gusto venir a Córdoba y participar aquí», recalca.
A partir de las 12.30 horas , los carros clásicos se han ido alineando ante la entrada de Caballerizas. Y ha concretado las miradas, y las fotografías con los moviles trabajando a buen ritmo, de cordobeses y turistas. De visita en la ciudad está la granadina Amelia García , que con su teléfono va inmortalizado los distintos coches que van llegando. «Estos carruajes son una maravilla, como Córdoba», sentencia.
Uno de los coches en los que se detiene es el de Manuel Valencia , que acude con su vehículo de 1870 desde Jerez de la Frontera para participar por primera vez en este concurso. Y muestra su satisfacción por que el Club de Carruajes de Córdoba haya decidido retomar esta competición. Recuerda que desde 2o19 no ha habido pruebas de atalaje y se declara «muy agradecido» a la organización por su «valentía» para celebrar este torneo, con una «organización perfecta» .
Al contrario que Valencia , el cordobés Lorenzo Miranda es un viejo conocido de esta competición, con su carruaje de 1897. Confiesa su «alegría» por que el Concurso Internacional se haya recuperado en 2020 . «Es otro paso más hacia la normalidad», afirma y se declara igual de contento por volver a ver «los coches en la calle» y sentir «la admiración de la gente». Aunque esto último también implique su sacrificio, porque, cuando se le pregunta por lo de llevar el traje típico de Ronsa en pleno verano, admite que «se pasa calor» .
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