MAYORMENTE DESPEJADO

UN SEÑOR DE BURGOS

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«Las nuevas conexiones nacionales a El Altet son buena noticia por lo turístico y lo económico»

Dedico el premio a un señor de Burgos que vive en mi escalera». No recuerdo ahora mismo si la frase corresponde a un monólogo de Gila o de Coll, humoristas geniales los dos de la época pre Youtube –de ahí la dificultad para rescatarla–, que es recurrentemente recordada en ciertos entornos en situaciones de guasa. Lo que importa es que ese vecino ya puede viajar a Alicante en avión después de que el aeropuerto de Villafría haya decidido incluir la Costa Blanca entre sus apuestas para este verano. El anuncio, por el mismo efecto que la cita anterior, se prestó tanto en Twitter como en la redacción a chanza.

No se sabe por qué, hay ciudades que hacen gracia, y suelen ser repetidas en monólogos y chistes como fórmula infalible para arrancar unas risas. La ciudad castellana está entre ellas, como muchas otras que arrastran la etiqueta de provincianas aunque ya no lo merezcan y entre las que también viene a la mente, por ejemplo, Albacete.

En la Vieja Castilla hay mucho bueno que ver y todavía mejor que comer o beber, pero sobre todo que aprender del carácter recio y noble de su gente. La línea brinda una nueva opción a los alicantinos de espíritu viajero y todo el área de influencia de su aeropuerto. Aunque lo realmente significativo es que una compañía más, en este caso Air León, haya apostado por nuestra provincia. Como también lo ha hecho Air Horizont desde Zaragoza y que desde ayer ya vende sus billetes.

Con exactamente 10.065.873 viajeros en 2014, El Altet estableció un récord que se espera superar. Además de mantenerse el tradicional buen comportamiento de las islas británicas, pilar principal del tráfico, el goteo de anuncios de nuevas rutas es incesante. En ellas se advierten síntomas de recuperación con Alemania y nuevos e interesantes horizontes comerciales con Italia. Sin embargo, es la apertura de conexiones conocidas en el argot aeroportuario como «domésticas» y que nunca antes habían existido lo que proporciona más motivos para el optimismo. Como indicador de la buena salud de nuestra provincia como destino y de la del bolsillo nacional.

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