Nintendo supera el bache con el sólido rendimiento de sus títulos exclusivos

Tras varios ejercicios negativos, la empresa japonesa de videojuegos Nintendo ha generado un beneficio neto de 14.300 millones de yenes (104 millones de euros) entre abril y septiembre, lo que representa casi 25 veces más que en el mismo período de 2013.

Según anunció este martes la compañía, esta mejoría en los resultados se debió a que la empresa logró recortar sus pérdidas operativas a 215 millones de yenes (1,5 millones de euros), muy por debajo del saldo negativo de 23.138 millones de yenes (168 millones de euros) que registró entre abril y septiembre del año pasado.

Durante este semestre, la primera mitad del año fiscal nipón, Nintendo facturó 171.399 millones de yenes (1.251 millones de euros), un 12,8% menos que en el mismo período de 2013.

El histórico fabricante de videojuegos ha logrado superar las expectativas de los analistas gracias al «sólido rendimiento» de títulos como «Super Smash Bros», para la plataforma portátil Nintento 3Ds o de «Mario Kart 8», para Wii U, así como a la mejora de las ventas de esta consola, según explicó la propia compañía.

Remontan las ventas de Wii U

Entre abril y septiembre se colocaron en todo el mundo 1,12 millones de Wii U, más del doble de las que se vendieron en el mismo período de 2013. En cuanto a las ventas de videojuegos, Nintendo colocó en la primera mitad de este ejercicio fiscal un total de 9,4 millones de títulos para Wii U en todo el mundo, por encima de los 6,3 millones del mismo período de 2013.

No obstante, bajaron las ventas de títulos para sus otras plataformas, a casi la mitad en el caso de la Wii (desde 14 millones hasta 6,1 millones), y desde 3,8 millones hasta 2,09 millones en los títulos para Nintendo 3DS XL y Nintendo DS. A partir de estos resultados semestrales, la empresa prevé salir de números rojos durante el ejercicio en curso y lograr un beneficio neto de 20.000 millones de yenes (146 millones de euros).

En 2014, la empresa perdió 23.222 millones de yenes (165 millones de euros). La empresa con sede en Kioto (oeste) aspira a facturar un total de 590.000 millones de yenes (4.307 millones de euros) durante el año en curso, un 3,2 por ciento que en 2014, así como a lograr un beneficio operativo de 40.000 millones de yenes (292 millones de euros).