Marissa Mayer: la revolución en el ojo del huracán
Marissa Mayer, durante su intervención en la pasada edición del CES 2014 - REUTERS

Marissa Mayer: la revolución en el ojo del huracán

La compañía de internet Yahoo gana un 65,3% menos en 2013 por las plusvalías anotadas en 2012 por la venta del portal chino Alibaba

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Llegó como un huracán y como un huracán llegaron los cambios. Yahoo, otra gigante de internet, buscaba su lugar en una era cada vez más móvil. Con la contratación de Marissa Mayer en verano de 2012 como máxima responsable de la compañía llovió gotas de esperanza reflejadas de revolución. Lo primero fue hacer limpieza, plantear severos cambios y tirar de chequera para recortar distancias con una competencia feroz que no da tiempo de reacción.

Con el anuncio de la destitución hace dos semanas del número dos de la compañía, contratado sin reparar en gastos, la luna de miel entre el grupo norteamericano y su líder podría estar llegando a su fin, según medios especializados. Henrique de Castro, que firmó un salario de 600.000 dólares anuales, tenía la misión de reflotar el negocio publicitario.

La relación entre ambos se fue deteriorando en los últimos meses hasta tomar la decisión de prescindir de su jefe de operación. Pero no ha sido la única marcha importante. Jai Singh, editor jefe, dimitió un día después.

Tensiones aparte, Yahoo sigue sin rumbo fijo y naufragando por olas gigantes sin capacidad de poner freno al asunto. La compañía logró un beneficio neto atribuido de 1.366 millones de dólares (unos 1.004 millones de euros) al cierre del ejercicio de 2013. Estas cifras representan un descalabro en términos económicos, teniendo en cuenta que representa una caída del 65,3% respecto al ejercicio anterior, según datos de la compañía californiana.

La razón esgrimida por la compañía para justificar estos resultados es la ausencia de elementos extraordinarios como las plusvalías en 2012 por la venta de acciones del gigante del comercio electrónico Alibaba, considerado el problema chino que lastraba el crecimiento. La compañía obtuvo el pasado ejercicio plusvalías 2.755 millones de dólares (2.026 millones de euros) por la venta de gran parte de su participación en el portal chino.

La caída suma y sigue sin cesar la sangría de ingresos publicitarios y beneficios. En cuanto a su cifra de negocio, Yahoo alcanzó en el conjunto de 2013 un total de 4.860 millones de dólares (3.574 millones de euros), lo que implica un descenso del 6,1% respecto al año precedente. No obstante, en el cuarto trimestre de 2013, generó un beneficio neto atribuido de 348,2 millones de dólares (256 millones de euros), un 27,8% más, mientras que su facturación disminuyó un 5,9%, hasta 1.265,8 millones de dólares (931 millones de euros).

Joven, «geek», elegante y culta, Mayer tenía la ardua misión de reflotar un barco con goteras e impulsar su crecimientos en medio de un mar de dificultades. Desde que tomó el control, propició una serie de adquisiciones pensadas para reclutar «talento», una de las más destacables e importante la compra del portal de blogs Tumblr por 1.000 millones de euros. Desde entonces, ha modificado el logo de la compañía, ha modernizado algunos servicios, el buzón de correo electrónico y, según sus últimos planteamientos, Yahoo se está centrando en el móvil, vídeo y contenido personalizado.

Pero estos esfuerzos no han sido suficientes para aguantar la segunda plaza del mercado digital en EE.UU. en favor de Facebook. De hecho, según los últimos indicadores, su cuota de mercado se ha reducido en medio punto,, hasta el 2,87%, mientras que los de Facebook y Google continúan su indiscutible escalada en el podio.

Pero un dato positivo a tener en cuenta y un alivio, no obstante: Yahoo se convirtió en el mes de diciembre en el portal más visitado desde ordenadores del territorio norteamericano, según datos de la compañía de medición Comscore (195,2 millones de visitas en diciembre, seguido por Google con 192,3 millones). El reto es, como el Ave Fénix, resurgir de sus cenizas...digitales, pero quizá el vuelo todavía necesita algo más de tiemp0 para estabilizarse.

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