Demandan a Snapchat por «provocar» un accidente de tráfico

Cuando uno piensa en los peligros de las redes sociales se suele pensar en la exposición de la propia imagen, otros problemas como el «cyberbullying», o síndromes como la adicción que pueden llegar a generar. Es más rebuscado pensar en que una red social pueda provocar un grave accidente de tráfico, por ejemplo, pero eso es exactamente lo que ha pasado en Georgia, Estados Unidos.

Christal McGee, usuaria de Snapchat y conductora, ha sido demandada después de provocar un accidente que ha dejado a otra de las víctimas con daño cerebral. Lo sorprendente es que la demanda también ha sido interpuesta contar la propia Snapchat.

El motivo es que la presunta razón del choque fue el uso de un filtro de Snapchat. Se trata de «Speed», un filtro que utiliza tecnología GPS para determinar cómo de rápido se está moviendo el usuario.

Los abogados demandantes han explicado en un comunicado que la demanda va dirigida a ambas partes porque Snapchat debería haber sabido que el filtro podría tener consecuencias muy peligrosas.

«Snapchat está obligado por ley a no ofrecer ítems peligrosos en el flujo del comercio, y tienen la responsabilidad de actuar razonablemenet para dar pasos con el fin de eliminar riesgos asociados con sus productos», dice Michael Terry, uno de los abogados.

Según este comunicado, McGee iba con dos compañeros de trabajo hacia casa y empezó a acelerar pese a que una de sus pasajeras estaba emabrazada y le pidió que frenase. En ese momento se puso a utilizar el filtro para ver a qué velocidad iba. «McGee quería postear una imagen suya yendo rápido. Decía que intentaba 'poner el coche a 100 millas por hora (160 km./h.) para postearlo en Snapchat'».

Entonces se produjo el accidente, que dejó a Wentworth Maynard cinco semanas en unidades intensivos por una severa lesión cerebral. Ahora sus abogados piden las consecuencias a la conductora imprudente, pero también a Snapchat.