Google ensaya un servicio de coches compartidos como Blablacar

Si algo funciona, para qué cambiarlo. Y si algo sabe de éxito, por qué no imitarlo. Deben pensar en Google que su experiencia en el campo del automovilismo es suficiente como para adentrarse en un negocio basado en la economía colaborativa como es BlaBlaCar o Uber, que han puesto en jaque a los sectores del transporte de medio mundo.

Pero la apuesta se conduce por la robotización de los sistemas. Apoyada en la aplicación Waze, adquirida en 2013, el gigante de internet ha comenzado a probar en Israel un servicio de vehículos compartidos, en donde poner en contacto a conductores y pasajeros que viajan hacia el mismo destino. Con ellos, se pretende ensayar su software «en distintos entornos de conducción, condiciones de carretera y patrones de tráfico».

Este programa piloto, denominado RideWith, utilizará el sistema de navegación definido por Waze para devolver las rutas con menor frecuencia de tráfico en aras de ahorrar tiempo en el desplazamiento, según desvela la compañía israelí en su blog corporativo.

Así, se apoya en la utilización de satélite para ofrecer información de tráfico en tiempo real. «Estamos realizando una pequeña prueba privada en el área metropolitana de Tel Aviv, pero no tenemos nada más que anunciar en este momento», ha explicado un portavoz de la compañía a Reuters.

De momento, el servicio prohíbe sacar rentabilidad al transporte -algo que le diferencia de negocios como Uber- y los conductores no podrán realizar más de dos viajes al día. Los responsables del proyecto, que aseguran que en caso de funcionar el servicio se internacionalizará, han justificado el lanzamiento al considerar que «compartir coche puede ayudar a reducir los costos de viaje y de combustibles, así como reducir el número de coches en la carretera y el estrés de estacinamiento».