Casi la mitad de los afectados por la diabetes no saben que la padecen

El consejero de Salud, Aquilino Alonso, aseguró ayer durante la inauguración de la exposición itinerante «Sugart» en el hospital Virgen del Rocío, que el trabajo realizado estos años por la Federación de Asociaciones de Diabéticos de Andalucía (Fada) ha demostrado que «su participación ha contribuido a mejorar la atención en la sanidad pública andaluza y, también, a mejorar la calidad de vida de los pacientes».

También señaló que espera seguir contando «con la colaboración y el compromiso de la federación» en el Anteproyecto de Ley para una Vida Saludable y una Alimentación Equilibrada, que ha comenzado a tramitarse tras su aprobación en Consejo de Gobierno y que podría estar aprobado por el Parlamento andaluz a lo largo de 2017.

El consejero insistió en que en Andalucía se lleva años trabajando en «enfocar bien la diabetes para que no suponga un obstáculo en la vida de nadie, de la mano de los equipos sanitarios y la asociaciones de pacientes». Añadió que desde 2003, se viene trabajando desde el Plan Integral de Diabetes, con el que se ha avanzado en la detección precoz, en la mejora del control y los tratamientos, en la atención a las complicaciones y en la educación diabetológica.

En este sentido, Aquilino Alonso refirió que la mortalidad por diabetes en Andalucía es actualmente menor que la media nacional (8,98 frente a 9,55), mientras en 1990 era de las más altas de España (26,41 frente a 18,49). Ofreció también datos de los ingresos hospitalarios que presentan tasas inferiores a la media nacional (34,9 frente 42,8 por cada 100.000 habitantes), como resultado de una reducción en las complicaciones, tanto agudas (cetoacidosis o descompensación hiperosmolar) como secundarias (ictus, infarto agudo de miocardio o amputaciones mayores).

El III Plan Integral de Diabetes, que se presentará próximamente, promoverá la actividad física y la alimentación equilibrada, por lo que la el papel de la futura Ley que prepara el Gobierno andaluz es clave. De igual modo, impulsará las estrategias de prevención, ya que además del millón de personas que podrían estar afectadas por esta enfermedad en Andalucía, casi 670.000 diagnosticadas y el resto lo desconoce, se estima que hay otro millón en riesgo de desarrollar diabetes.

Coincidiendo con el Día Mundial de la Diabetes, Aquilino Alonso inauguró ayer una original exposición en la que el azúcar es la materia prima de las obras o uno de los ingredientes para su elaboración. Las protagonistas son cuatro mujeres con la enfermedad: Angelines, Carmen, Emilia y Mari Carmen.

Una representa la concienciación en el cuidado, la normalización, la aceptación y el positivismo. Otra, aunque a veces se siente sola, afronta la enfermedad con optimismo y dirige una asociación de personas diabéticas. La tercera protagonista no consigue tomar conciencia del problema, como tampoco lo hace su familia, por lo que necesita ayuda. La cuarta protagonista ha sufrido las consecuencias de esta patología, pero confiesa que no se rinde y que seguirá luchando.

Esta muestra, que podrá visitarse en el vestíbulo del hospital General Virgen del Rocío hasta el 7 de diciembre, pretende sensibilizar y concienciar sobre la diabetes a través de la transmisión de las vivencias y experiencias de estas cuatro mujeres. Ángela Mena, Tonia Trujillo, Carmen Salazar y Pepe Chazeta son los cuatro artistas que han plasmado los testimonios en las obras que podrán verse.

El objetivo de este proyecto artístico es trasladar a la sociedad el impacto de esta enfermedad y acercarla para conseguir un mayor conocimiento y concienciación en torno a la misma.

Así, se darán mensajes como que la diabetes es un problema de salud frecuente, crónico y potencialmente grave; su aparición se asocia, fundamentalmente, a determinados estilos de vida, desigualdades sociales y nivel educativo de la población; su prevención implica importantes modificaciones sociales, culturales y de comportamientos/conductas individuales; y en la atención es fundamental la implicación de numerosos agentes del sistema sanitario, y también del no sanitario, así como la participación activa del paciente.