Un niño con cáncer cumple su sueño de convertirse en bombero de Nueva York

Un día se encontró los camiones debajo de su casa, y desde entonces su vida ha cambiado

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El pequeño Trucker Dukes, de tres años, se encontró por casualidad con el mejor regalo que podía recibir cualquier niño de su edad: se convirtió en miembro honorario del cuerpo de bomberos de Nueva York. Según explicó su madre, Shauna Dukes, esta es una de las «trágicas bendiciones» que se ha encontrado a lo largo del camino que emprendió hace ahora año y medio para luchar contra el cáncer, según publica « Today».

Originario de Maui (Hawaii), el pequeño y su madre viven ahora en Nueva York, donde está siendo tratado de un neuroblastoma en estadio 4, un cáncer raro y agresivo que afecta al sistema nervioso. Un día, al llegar a casa después de haber recibido su tratamiento, se llevaron una verdadera sorpresa al ver a un montón de camiones abajo, en la puerta de su edificio.

«Pensó que cada camión de bombero era para él», dijo su madre. Su padre trabaja también en los bomberos, pero en Hawaii. «Cada vez que escucha una sirena, su mandíbula no puede contener la emoción». Y así sucedió.

Al final, resultó ser que los bomberos se encontraban allí por un simple fuego en una cocina. El pequeño, que estaba tan encantado de verlos, corrió hasta ellos, directo a las manos de James Grismer. «Vi al pequeño correr hacia mi con los ojos llenos de emoción», comentó a la prensa. «Abrí los brazos y se me abrazó. Fue como si hubiéramos sido amigos durante años».

Grismer lo invitó a visitar la estación de bomberos y ese fue el inicio de una bonita amistad que aún dura. Allí le montaron una tercera fiesta de cumpleaños y también pasaron Halloween, entre otros eventos.

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