El bosque del lobo

A principios de siglo, en la atrasada Galicia, Benito Freire es un enfermo epiléptico considerado por todos, incluso por él mismo, como un ‘hombre lobo’. Buhonero de oficio, recorre los pueblos de la región comprando mercancías, llevando cartas comprometedoras y acompañando a las gentes que van de viaje. A pesar de su extremada religiosidad, cuando está solo en el bosque de Ancines con alguna mujer, le da un ataque y la estrangula.

Interesado por la novela "El bosque de Ancine"’, de Carlos Martínez-Barbeito, el guionista y director Pedro Olea se convirtió en productor para hacer este filme, su primera película personal tras “Días de viejo color” y “En un mundo diferente”. José Luís López Vázquez es el encargado de dar vida a este personaje tan extraño calificado de ‘hombre lobo’. La película, narrada con lentitud, muestra varios flash-backs, que descubren la desgraciada infancia del protagonista, y un rótulo que explica que está basado en hechos reales trata de conseguir un realismo que, en definitiva, no se obtiene, tanto por la inexperiencia de Olea como por la censura del general Franco.