Los templos del Jazz en Madrid

Hace medio siglo un lector de ABC se lamentaba en una carta al director del escaso interés que Ella Fitzgerald y Duke Ellington habían despertado entre el público madrileño en su primera actuación en España. «En Madrid no entienden de jazz», tituló la aguda misiva que hoy recuerda la difícil acogida de un género que este domingo celebra su día internacional. La gran voz femenina y el pianista actuaron en febrero de 1966 en el Teatro Monumental. La considerada «primera dama de la canción» apenas interpretó un par de temas, mostrando el mismo entusiasmo que el público debió rendirle aquella tarde. Tres décadas antes, el exotismo racial de Josephine Baker había echo una fugaz parada en la capital.

Actuó en el desaparecido Gran Metropolitano y, en aquella cita no cantó jazz, solo bailó su famoso «Banana Dance».

Lejos de la desidia con la que Madrid trató entonces esa música, la capital vibra ahora, casi todas las noches, con algún concierto o una improvisada «jam». Lo hace alguno de los templos que este género tiene en la capital. Verdaderos supervivientes de un tipo de local que impulsaron espacios como los míticos Whisky Jazz y su hermano el Bourbon Street –que cerraron en los años 90– sin olvidar las históricas noches del colegio mayor San Juan Evangelista « El Johnny» . Tiempo después llegó Clamores (Alburquerque, 14). El año pasado celebró su 35 aniversario certificando su sello de rincón sagrado para los amantes del jazz. La cantante francesa Marie Martin se subirá a su escenario –por el que han pasado figuras históricas como Pedro Iturralde o más actuales como Gregory Porter– este domingo en un dúo con Javier Sobrino. Será a las 21 horas.

El jazz madrileño vive de noche. Otro de los espacios con ecos de «big band» es el Café Central (plaza del Ángel, 10). Este año cumple también su 35 aniversario después de que la sombra del cierre planeara sobre él hace dos años. La historia del Central sigue tan viva como la música que se da cita en él todos los días de la semana. Por allí han pasado pianistas de la talla de Randy Weston, el fallecido George Adams –la primera gran figura internacional que se se subió a su escenario– o Chano Domínguez con su flamenco jazz.

Esta semana, el Cuba Latin Jazz Quartet de Javier Massó «Caramelo» llena de ritmo las noches de este local. Estará hasta el domingo, a las 21 horas junto a la trompeta de Erik Sánchez, el contrabajista Yelsy Heredia y Georvis Pico a la batería.

Precisamente, la Habana ha sido seleccionada este año para ser la ciudad anfitriona mundial del Día del Jazz. La celebración pretende poner en valor este género musical como «fuerza de libertad y creatividad para promover el diálogo intercultural a través del respeto y el entendimiento y la unión de los pueblos de todos los rincones del planeta», explica la Unesco, promotora de esta cita universal.

Bogui Jazz (Barquillo, 29), que abrió sus puertas en 2005, se suma al evento con tres conciertos –hoy, mañana y el domingo a las 21.30 horas– de una de las leyendas vivas del jazz mundial: Barry Harris. Compañero sobre los escenarios de glorias como Charlie Parker, Miles Davis, Dizzy Gillespie o Dexter Gordon, a sus 87 años, el pianista de Detroit es el último representante en activo de la época dorada del «bebop» y el mejor intérprete del repertorio de Thelonious Monk o Bud Powell. El genio, reconocido como el «mejor educador de jazz de la historia», ha decidido compartir su sabiduría con músicos profesionales y aficionados que se han sumado esta semana a sus clases magistrales en Bogui Jazz. Harris pondrá uno de los mejores broches al evento.

«Aranjazz»

El festival «Aranjazz» de Aranjuez, que ha homenajeado el mundo jazzístico durante todo el mes de abril, cierra su programa con tres citas ineludibles. La primera, esta noche a las 21 horas en el Teatro Real Carlos III (Calle de San Antonio, 68), es un tributo a Miles Davis. La voz aterciopelada de Janine Johnson y su Jazz Quartet hará vibrar mañana el Auditorio Joaquín Rodrigo a las 21 horas. Yoio Cuesta participará en el homenaje al jazz en su día. Será el domingo, en la Finca de la Ribera (antigua carretera de Andalucía, km. 43), a las 13.30 horas.