LOS MIL USOS DE UN NEUMÁTICO
Porterías antivuelco para proteger a los niños
A partir del reciclaje de caucho se crean piezas que dan más estabilidad a los equipamientos deportivos
Todo el mundo sabe que el deporte es saludable. «Sin embargo, pocas personas conocen el peligro que entraña una portería no anclada al suelo», explica Antonio González, quien ha desarrollado un sistema antivuelco para esta clase de equipamiento deportivo tan habitual en parques e instalaciones. A partir de caucho reciclado procedente de neumáticos que han llegado al final de su vida útil, el empresario ha diseñado una pieza que actúa de contrapeso en caso de que, por ejemplo, los usuarios decidieran colgarse del larguero parar celebrar un gol o la victoria de su equipo.
«No eliminamos el peligro al 100%, pero sí reducimos al máximo sus fatídicas consecuencias para la persona implicada, proporcionándole un tiempo de reacción suficiente para que se aleje de la portería antes de que esta vuelque, pues previamente se desliza», detalla González. «Hemos pensado, sobre todo, cómo proteger la parte más vulnerable de los niños, la cabeza», continúa.
«”Porterías asesinas”, así denominan muchos medios de comunicación a esta clase de equipamiento deportivo que está a menudo, por desgracia, involucrado en numerosos accidentes con niños . Accidentes que pueden resultar mortales o provocar minusvalías graves a nuestros hijos», apunta González, que realizó una exhaustiva investigación sobre la estabilidad de tales estructuras previa a la patente de su sistema «TutiGool». Dicho trabajo de ampliación del conocimiento existente en materia de seguridad deportiva continúa hoy gracias a la colaboración de la Universidad Pablo Olavide de Sevilla . En especial, de la profesora Marta García, quien está configurando protocolos generales y dirigiendo diversos estudios.
Cómo funciona
El pie de la portería debe cubrirse por completo con varias piezas a fin de impedir la caída del elemento. La presencia de tal «almohada de caucho» no aumenta, en principio, el riesgo de sufrir una lesión si alguien, en un lance fortuito del juego, se golpeara contra ella. Se trata, de hecho, del mismo material que ya se emplea en la fabricación de pavimentos elásticos de seguridad infantiles .
La primera portería a la que se le instaló dicho complemento se encuentra en un lugar de libre acceso dentro del municipio malagueño de Alcaucín , donde «en invierno hace mucho frío y en verano mucho calor». Sin embargo, el caucho se adapta bien a cualquier condición meteorológica. Tras seis años de funcionamiento resulta «inapreciable» el lógico deterioro de los gránulos de caucho. Basta una revisión visual cada seis meses para garantizar su conservación, asegura su inventor.
El nuevo sistema contribuye, también, a amortiguar el impacto del balón o de los jugadores sobre los postes y el travesaño. Y dispone de un elemento antirrobo , cumpliendo la normativa del Consejo Superior de Deportes , para impedir la fácil manipulación por los usuarios del equipamiento.
Distintos municipios de Galicia , Andalucía , Cataluña y País Vasco han contactado ya con González para instalar porterías más seguras en su territorio, donde, en ocasiones, aún se fijan con bloques de hormigón, cuerdas o cadenas, lo cual entraña un peligro.
La multinacional Mondo ya comercializa los estabilizadores de González. «Porterías con mi sistema se han usado recientemente en eventos importantes, como el partido entre las selecciones de fútbol sala de España y Brasil. Seguridad máxima para deportistas de élite que hay que trasladar a los niños », concluye el empresario.
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