Megane es sinónimo en Renault a uno de los mayores éxitos de la marca desde su lanzamiento en 1996. Desde entonces, es la gama más vendida en el mercado español con más de 1.300.000 coches. Los números continúan siendo protagonistas. Líder en 12 ocasiones, es el año 2004, uno de los mejores en cuanto a ventas, cuando se destaca con el récord absoluto de 117.624 unidades matriculadas. La nueva gama, que incorpora el frontal con el rombo de gran tamaño y otros detalles del último lenguaje de diseño, al igual que en los últimos modelos, hereda todo lo necesario para continuar presumiendo de ser la referencia en el segmento más competitivo del mercado.

Con los nuevos detalles estéticos, la gama Megane comparte el estilo más novedoso con los últimos Renault y pasa a ofrecer una imagen más dinámica. El típico rombo de la marca, sobre un fondo negro brillante, es mucho más grande y va ubicado en una posición más vertical. La nueva calandra difiere también de la anterior, lo mismo que los paragolpes, las rejillas de aireación y los faros, que ahora son elípticos y se prolongan hacia los laterales e incorporan las nuevas luces diurnas led. Además se ha renovado el diseño de todas las llantas de aleación y embellecedores de la gama.

El nuevo Megane se ofrece en carrocería berlina, familiar y cupé, así como la versión deportiva R.S. que es la más potente. La versión de acceso a la gama es el berlina con motor de gasolina de 115 CV y acabado Life. Fabricado en Palencia, la producción de casi todos los motores es también Made in Spain (se realiza en Valladolid) y y cerca del 70 % de las cajas de cambio se hace también en la factoría de Sevilla.

Renault ha querido que esta evolución de la gama sea más sencilla para el usuario a la hora de elegir el equipamiento. La oferta comercial se concentra ahora en tres niveles de acabado, Life, GT Style y Bose, frente a los cinco que se ofrecían hasta el momento. Hay un cuarto denominado Business que se vende solo a empresas.

El nuevo nivel Bose es el más completo y presenta un nivel alto de gama que incorpora de serie navegador TomTom, llantas de aluminio de 17 pulgadas, retrovisores abatibles eléctricamente, sistema de audio Bose “Energy Efficient Series” de ocho altavoces, con amplificador digital y siete canales de ecualización.

En relación a los motores, hay dos de gasolina de 115 y 130 caballos de potencia, ambos con sistema Stop&Start. El menos potente, con el dispositivo ESM de recuperación de energía, no paga impuesto de matriculación gracias a unas emisiones de 119 gramos por kilómetro. Asociado al equipamiento Style supone el primer acceso a la gama, con un precio a partir de 15.350 euros.

En diésel la oferta es triple, con los dCi de 95, 110 y 130 CV. Se introducen mejoras en el primero que gana cinco caballos de potencia y 40 Nm de par máximo y ahora se presenta con caja de cambios de seis velocidades; destaca por un consumo medio de 4,1 litros y unas emisiones de 106 g/km; tampoco paga impuesto de matriculación.

En cuanto a las cajas de cambio, se amplía la oferta de transmisiones automáticas con la comercialización de la nueva versión TCe 130cv EDC. Se trata de la primera vez que se ofrece la caja de doble embrague “Efficient Dual Clutch” en una motorización de gasolina. Es un cambio mucho más cómodo y si se quiere también deportivo, con unos niveles de consumo y emisiones un 25 % más bajos que los de sus predecesores.