Brayan Bremer junto con otro de los fugitivos de la cárcel de Manaos en una foto colgada en Facebook tras la huida
Brayan Bremer junto con otro de los fugitivos de la cárcel de Manaos en una foto colgada en Facebook tras la huida - FACEBOOK

FacebookUn preso de Brasil retransmite su huida de la cárcel a través de selfies

Brayan Bremer logró escapar de la prisión de Manaos el pasado domingo, aprovechando el motín en que murieron más de 60 personas, y ahora cuelga en Facebook fotos de su periplo por la selva amazónica

MADRID Actualizado: Guardar
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Brayan Bremer, un preso que escapó el domingo por la noche de la cárcel brasileña Antônio Trindade —en Manaos, en el Amazonas—, está restransmitiendo a través de las redes sociales su huida, algo que mantiene perplejos a sus compatriotas. El lunes por la mañana colgó una foto con otro prisionero en su cuenta de Facebook. Llevaba una camiseta del Bayern de Múnich y, el pulgar hacia arriba y, al igual que su compañero, estaba manchado de barro. No tuvo reparos en titular la foto como «Fugándonos de la cárcel».

Consciente de que la imagen se había hecho viral, el fugitivo ha tratado de mantenerse activo en las redes sociales y de seguir relatando su huida. El martes subió otro selfie en el que, esta vez, aparecía él solo.

Con otra ropa, decía que estaba llegando a Maués, una ciudad a cerca de 270 kilómetros de Manaos, considerada una de las más hermosas del Amazonas gracias a sus playas paradisiacas. Bremer, además de permitirse el lujo de dar pistas acerca de su localización, no dudó en alertar de su llegada a la ciudad con un: «Que se cuiden las solteras».

Sus fotos acaparan la atención del país. Los comentarios van desde quienes le animan en su fuga o se lo toman a broma hasta aquellos que piden que se entregue o, directamente, recurren a los insultos. De lo que no cabe duda es de que el preso ya es protagonista de multitud de memes que pululan por la red.

Bremer logró escapar de la prisión de Manaos durante el motín que se produjo el pasado domingo, uno de los episodios más sangrientos que ha vivido Brasil en los últimos años. La rebelión acabó en una masacre que dejó al menos 60 muertos, vinculados al Primer Comando de la Capital (PCC), la mayor facción criminal brasileña que organiza la delincuencia desde dentro de las prisiones. El motín fue dirigido por el grupo Familia del Norte (FDN), facción rival del PCC, y comenzó el domingo por la tarde, cuando seis cuerpos decapitados fueron lanzados sobre los muros de la prisión. La guerra duró 12 horas.

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