Pierre Casiraghi regresa a Palma mientras Beatrice continúa su luto en Milán

Pierre Casiraghi ha regresado a Palma. Pese al mal momento personal que vive junto a su esposa Beatrice Borromeo y la familia de ambos por el reciente fallecimiento de la abuela materna de ella, la condesa Marta Marzotto, Pierre ha regresado a la isla por primera vez para participar en la 35 edición de la Copa del Rey de vela, tal y como era su intención antes de que se conociera la triste noticia.

Tras su regreso de Milán, donde acompañó a su su mujer en el funeral, se ha incorporado con naturalidad a la competición en defensa del Yacht Club de Mónaco y a bordo del barco «Malizia», un catamarán de diez metros de eslora y seis de manga que puede alcanzar los 150 kilómetros por hora, según dicen, el más rápido del mundo.

Pierre es un apasionado de los deportes náuticos y de la velocidad. Se comporta de manera sencilla, pese a ser el hijo de Carolina de Mónaco y nieto de Grace Kelly. Posa para los fotógrafos, habla con los periodistas... Quiere ser como cualquier otro pese a la presión mediática a la que se ve sometido.

Anoche, en la tradicional Cena de Armadores en Mallorca, el clásico encuentro de las tripulaciones en el Real Club Náutico donde también estuvieron Olivia de Borbón, Carla Goyanes y Raquel Sánchez Silva, bebió champán y se mostró simpático con un «look» repeinado y vestido con colores claros, como los demás asistentes. En la velada se sintió la ausencia del Rey Felipe VI, que no pudo estar presente.

El dolor va por dentro y el joven no quiere hundirse. Todo lo contrario, prefiere seguir el cauce natural de su vida con tranquilidad. Beatrice Borromeo no ha viajado a Palma, pues no se encuentra con fuerzas para ello aún. La joven le profesaba un gran amor a su abuela.