José Coronado y su historial de mujeres

José Coronado García (Madrid, 14 de agosto de 1957) ha tenido, desde hace mucho tiempo, la fama de ser un hombre guapo, educado y reservado. Aunque ha sido protagonista de muchas crónicas del corazón, Coronado ha sabido llevar de forma muy cuidada su vida íntima, aunque tuviese romances con otras figuras relevantes del espectáculo. Ahora se le relaciona con Eugenia Martínez de Irujo.

«La fama de seductor es cosa del pasado», dijo a ABC en 2012, tras ganar el Goya a Mejor actor por su papel en «No habrá paz para los malvados». En 1987, año en el que inició oficialmente su carrera con «Waka-Waka», una relación del actor atrapó la atención de los medios, ya que empezó a salir con Paola Dominguín, hija del torero Luis Miguel Dominguín y la actriz Lucía Bosé, y hermana del cantante Miguel Bosé. De esa relación nació su primer hijo, Nicolás, que llegó al mundo en 1988.

La pareja, que no llegó a contraer matrimonio, se mantuvo unida hasta que se separaron en 1991 entre rumores de infidelidad. Esta ha sido su relación mas larga conocida.

Un año antes, el actor había grabado la película «Yo soy esa» con Isabel Pantoja, con la que compartió apasionados besos y química en la pantalla. Muchas personas aseguraron que Pantoja y Coronado tuvieron una aventura. Coronado lo negó, diciendo que nunca le había sido infiel a Paola Dominguín con Pantoja, y que solo mantenía una bonita amistad con la tonadillera. La cantante también lo negó por su parte, y se han guardado la verdad durante más de 20 años. De todas formas, la prensa del corazón incluye a Pantoja entre la lista de romances del actor.

Después de su separación de Dominguín, a José Coronado fue relacionado sentimentalmente con Amparo Muñoz, Lola Forner, Amparo Larrañaga, Silvia Munt, la alemana Monique Salvan, Majós Martínez y Eva Saulado, entre algunos de los nombres más sonados, hasta que en 1997, inició una relación con la actriz Silvia Abascal. El amor de pareja no prosperó en este caso, pero de ahí nació una bonita amistad. El actor ha calificado en entrevistas posteriores a Abascal como una de sus mejores amistades dentro del mundo de la actuación.

Tras otras relaciones, en 2000 inició uno de sus años más interesantes para la prensa rosa. El actor comenzó en esa ocasión una relación con la modelo Esther Cañadas. El amor fue efímero entre Coronado y Cañadas, un par de meses, y ese mismo año, él sorprendió al hacer pareja sentimental con la cantante Mónica Molina.

Con Molina estuvo dos años de relación intermitente, según explican desde «Lecturas», y cuando se pensaba que romperían, anunciaron el embarazo de ella. Tuvieron a su hija Candela a finales de 2002, y tres meses después de su nacimiento, anunciaron la separación. Ambos han señalado que han mantenido una buena amistad con los años.

Después, ese mismo año, Coronado protagonizó otro romance, sonado pero muy, muy fugaz. El actor fue pillado con una joven Paula Echevarría en una escapada romántica a Lanzarote. Les separaban 20 años, y ella aún comenzaba sus primeros pasos en el mundo del espectáculo. Hay fotos de ellos juntos en el aeropuerto, pero no se les volvió a relacionar de manera sentimental.

Los siguientes años, siempre cauteloso con su vida privada, el actor mantuvo algunas relaciones fuera del foco de las cámaras hasta que inició una nueva relación, esta vez con Elena González del Prado. Llegaron a vivir juntos y mantuvieron una relación estable hasta que se separaron en 2012. Cuando salían el actor confesó que él era un hombre de mujeres pero no de matrimonio. «No soy de casarme, me gusta más el contrato día a día basado en el amor. Mi vida siempre ha estado rodeada de mujeres, mi madre, mi hija y muchas más mujeres», decía en un evento público.

Ahora ha sido fotografiado en actitud seductora con la hija pequeña de la duquesa de Alba, Eugenia Martínez de Irujo, y ya se les ha calificado como «la pareja sorpresa del verano».