Diez dulces de los conventos de Cádiz que no debes dejar de probar
Una selección de algunos de los mejores productos que realizan las monjas de la provincia
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123456789101. Pestiños de las Franciscanas de la calle Barja
Los pestiños de las monjas de la calle Barja de Jerez - a. vázquez Existen muchos pestiños pero los que elaboran estas hermanas son exquisitos. Es un dulce que se hace en este convento desde hace setenta años y se vende sólo en Navidad por lo que ahora es el momento de probarlo. La receta según nos explica una de las hermanas es muy sencilla. Se utilizan los ingredientes de toda la vida, los habituales. Harina, aceite, vino fino, matalauva, canela y ajonjolí. Las hermanas franciscanas comentan que no existe ningún secreto a la hora de realizar estos pestiños. «La matalauva y el ajonjolí se echan en el aceite caliente para que se pasen un poco y coja el sabor. Después se fríe y se le añade la miel», comenta una de las hermanas. En este convento hay doce religiosas y todas ellas están también en el obrador. Al margen de los pestiños otro manjar muy preciado y que sí venden todo el año es la delicia de chocolate, una magdalena que supera cualquier expectativa.
2. Las 'encomiendas' del convento Espíritu Santo
Las famosas 'encomiendas' del convento portuense - a. vázquez El convento del Espíritu Santo de El Puerto es uno de los que más dulces elabora en la provincia y cuenta con una variedad muy extensa, pero el más exclusivo es la ‘encomienda’ porque es muy tradicional y antiguo. Se trata de una especie de pasta diferente a las habituales. No lleva mucha azúcar y se le marca una encomienda (que es la cruz doble que llevan estas religiosas en el escapulario). Los ingredientes que se utilizan son manteca de cerdo, azúcar, ralladura de limón, naranja, ajonjolí y harina. «Todo esto se une y amasa y entre rezos y oración se prepara. Cuando está en su punto perfecto, no muy dura, la laminamos y cortamos una a una, se sella, se pone huevo y se mete en el horno hasta que esté en su punto de cocción, que entonces se saca. Nos gusta que el dulce esté hecho y es muy rico el contraste de sabor de esta pasta», apuntan desde el convento. Este manjar dorado característico de las hermanas de El Puerto lo realizan todo el año y se vende mucho también sobre todo gracias a la labor de los voluntarios que ayudan a las religiosas del convento del Espíritu Santo a vender sus productos por muchos sitios de la provincia.
3. Tocinos de cielo de las Dominicas de Sanlúcar
El tocino de cielo, un postre clásico y exquisito - a. vázquez El tocino de cielo lo elaboran las Dominicas de Sanlúcar desde hace al menos 40 años. Este postre tradicional y tan extendido encandila a los que lo prueban. Sor Esperanza es la encargada de su elaboración. Los ingredientes son los habituales: huevo y azúcar. Y la clave es que «es todo muy natural». Se baten las yemas de huevo y se añade el azúcar y luego se pone al ‘baño maría’ unos minutos para que no se pase. Las hojaldrinas, las pastas de almendras, los roscos y la torta de polvorón también gustan.
4. Empanadillas rellenas del convento del Corpus Cristi
Las empanadillas de las Mercedarias Descalzas de Arcos - a. vázquez Las Mercedarias Descalzas de Arcos son unas espléndidas reposteras. Llevan también muchísimos años elaborando dulces, tantos que no sabrían concretarlos. Las hermanas de este convento utilizan ingredientes naturales. Las empanadillas de cabello de ángel se hacen con harina, vino, aceite y cabello de ángel. Lo primero es preparar la masa con la harina, el aceite y el vino y se estira muy bien. Después se le pone el cabello de ángel y se forma la empanadilla y a continuación se fríe en el aceite. «Es fundamental echarle el azúcar cuando están aún calentitas, antes de que se enfríen», comenta una de las madres Mercedarias. Las empanadillas rellenas es un dulce muy típico de Arcos por la ‘antigüedad’ que tiene. Se hace casi durante todo el año excepto en verano que sólo lo realizan por petición del Parador.
5. Sultanas de coco de las Carmelitas Descalzas de Sanlúcar
Otro dulce tradicional que es muy demandado - a. vázquez Estas monjas también realizan muchos tipos de dulces y sobre todo en la época de Navidad. Para la sultana de coco lo fundamental es sobre todo el azúcar y el almíbar que se utiliza. «Hay que hervir el almíbar hasta llevarlo a su punto justo. Junto a las claras de huevo y el azúcar se añade el coco rallado y después se le echa un poco de azúcar glass». Esa es la receta que siguen para este atractivo dulce en este convento de Santa Teresa de Sanlúcar.
6. Tejas de Arcos del convento del Corpus Cristi
La teja es un producto hecho a base de almendra - l. v La teja de Arcos es otro de los productos estrella de estas monjas arcenses. Es un dulce más nuevo porque lo elaboran desde hace unos cuatro años pero tiene mucho éxito y gusta mucho a los amantes de lo dulce y la almendra. En una bandeja se echa la almendra molida, el huevo y el azúcar. Se pone al horno y se divide en trozos antes de que se enfríe. «Es un producto que gusta mucho a todo el público y nos lo piden a menudo», comenta una de las hermanas
7. Mazapán del convento Madre de Dios de Jerez
Las monjas hacen los mazapanes con formas de peras y manzanas - a. vázquez Las hermanas clarisas de Jerez elaboran unos mazapanes exquisitos con formas de manzanitas y peritas. Se hacen de la forma más artesanal que existe con el azúcar y la almendra que se necesitan y después las propias religiosas van dando forma a estos pequeños bocados que tanto gustan.
8. Los Higos al licor del convento Espíritu Santo
La maceración es muy importante para el resultado final - l. v Es otro de los dulces más pretendidos por quienes conocen los productos que elaboran las monjas del Espíritu Santo. Una de las hermanas es la encargada de la elaboración con la ayuda de sus compañeras y le pone mucho empeño porque salgan exquisitos. Hay que preparar los higos, lavarlos muy bien y sobre todo, macerarlos con el coñac. Después se bañan en chocolate y quedan irresistibles. Aunque no les falta público, desde el convento portuense han notado también la crisis y el descenso de las ventas aunque el voluntariado les ayuda enormemente. «Nos gustaría que se hiciera más tradición eso de comprar dulces a las monjas porque todo lo que tenemos está buenísimo», comenta una de las monjas.
9. Alfajores de las Agustinas Recoletas de Medina
El alfajor es uno de los dulces navideños más extendidos - l. v Medina no se entiende sin su dulce más conocido, el alfajor. En el monasterio Jesús, María y José las hermanas siguen la fórmula más tradicional. Sus ingredientes son naturales: miel, almendras, avellanas, harina, pan rallado y matalauva, ajonjolí y canela. Con la masa bien preparada y aún caliente se corta y después se pasan por el almíbar y se cubren con azúcar.
10. Yemas del convento Espíritu Santo de El Puerto
Las yemas se elaboran con huevo y azúcar - a. vázquez En el Puerto las hermanas del Espíritu Santo elaboran también unas yemas buenísimas. Se hacen con huevo y azúcar y el resultado es excepcional. «Gustan muchísimo. Además nosotras mismas vamos innovando y creando nuevos productos. Tenemos la yema y el bombón y bañamos la yema en chocolate por ejemplo», comenta una de las religiosas del convento.
