Blanca Romero: «Pensé en acoger a una familia de refugiados, pero a mi hija Lucía le da miedo»

Como si fuera una alumna de primero de la ESO que no se ha aprendido bien la lección. Así se comportó Blanca Romero ayer en el Centro Comercial Gran Plaza 2 de Majadahonda, cuando participó en «Un baile una sonrisa». Una iniciativa solidaria -donde también participó Unicef-, con el objetivo de conseguir fondos para apoyar a los niños sirios afectados por el conflicto de su país. Una iniciativa muy bonita que estropeó su madrina de honor. La acción durará hasta el domingo y consiste en que las personas que acudan al Centro Comercial bailen. Por cada minuto el centro donará 2 euros.

«¿Por qué ha decidido participar en una causa como ésta?», le preguntó este periódico. Contestó de carrerilla para que no se le olvidase ningún dato: «Hay millones de familias que han tenido que salir de sus casas.

Más del 80 por ciento de estos refugiados proceden de Siria. Más de 4 millones de refugiados, la mayoría niños, han abandonado el país desde que empezó el conflicto hace cinco años y es terrorífico. Unicef trabaja dentro de Siria y en países vecinos proporcionando suministros de emergencia, agua potable, servicios de salud y educación». Como si fueran los puntos de un Power Point, la exposición de un trabajo donde se habla del conflicto en Siria o el guión de una de sus películas.

Después apareció la Romero que improvisa y habló de que a ella, como madre, le había «impactado mucho la imagen del niño en la playa». Tarde. Ahí la modelo ya había perdido toda su credibilidad. «Es algo que te rompe el corazón y siempre piensas que nos puede pasar a nosotros también», decía rasgando los ojos, como en una película, para concluir: «No tengo palabras».

— ¿Ha pensado en acoger a algún refugiado?

— Sí. De hecho se lo comenté a Lucía. Le pregunté: «Luci, ¿y si acogemos a alguna familia?». Y me contestó: «Qué miedo, mamá». Tiene 16 años y ante lo desconocido se asusta. Pero sí que lo pensé.

El pasado mes de agosto, Romero publicó una imagen en Instagram donde aparecía junto a su hija Lucía y el padre de ésta. Un modelo llamado Warren que desapareció de sus vidas cuando la pequeña tenía un año. Esto lo contó la propia Romero a la revista «¡Hola!» al poco de publicar la instantánea. Lo acontecido después de la desaparición de Warren es de dominio público. La actriz conoció a Cayetano Rivera y, cuando se casaron, el torero adoptó a la pequeña y le dio sus apellidos. A la modelo no le importa hablar de su hija, pero ahora sí se niega a hablar del padre de su hija.

— ¿Qué consejos le da a su hija ahora que está empezando a desfilar?

Que ahorre al máximo y se compre su pisín cuanto antes y saque su dinero para montarse su negocio. Y que tenga en cuenta que eso se acaba.

— ¿Modelan las dos por el pasillo de casa?

Intenté enseñarle a modelar, pero me di cuenta de que casi no me acordaba ni yo. Al final acabamos las dos por la carretera con los tacones y el pijama. (Risas). Los ciclistas fliparon. Pero hoy en día no se desfila, simplemente se camina con seguridad.

— Desde aquel encuentro en el 98 con su padre, ¿no han vuelto a saber nada de él?

(Niega con la cabeza cuatro veces). Lo siento, no te voy a contestar.

Minutos después, en un photocall repleto de periodistas, las preguntas sobre el padre de Lucía y el de Martín -del que todavía no se conoce su identidad-, se repiten. «Me chocó que publicar una imagen así tuviera esa repercusión. Es una cosa natural, una verdad que está ahí y que no hay que esconder», responde a la primera pregunta. «Teníamos un baúl y haciendo una mudanza salió la foto», responde por segunda vez. «Y ya no os voy a hablar más del tema, lo siento», sentencia. «¿Se ha vuelto a poner en contacto con usted?». «¿No tienen relación?». «¿Espera hacerlo de una forma tan natural cuando desvele la identidad del padre de su hijo?». Las preguntas le llovían a Romero por todas partes. «El padre de Martín también es muy guapo», se atrevió a decir. Curiosamente dio esa misma respuesta el pasado mes de abril, cuando empezó a dar pistas sobre el padre de Lucía. «¿Y cómo es el padre?». «¡¡¡Ya está bien, se acabó. Me agobiáis con tanto padre, tanto padre!!!», gritó mientras salía corriendo del corrillo de periodistas. Instantes después, Romero recula y cuenta que ya no estará en la segunda temporada de la serie «Bajo sospecha», volviendo a hablar como quien intenta recordar en un examen oral las palabras exactas para no equivocarse.

Sobre la próxima boda de Cayetano Rivera y Eva González, la modelo contó que entre ellos «no hay una mala relación» y que no sabe si su hija Lucía acudirá a la boda. «Me alegro muchísimo y les felicito a los dos», sentenció.